Enclavado en los famosos Alpes suizos, es uno de los sitios turísticos preferidos por los amantes de las actividades de nieve
El pueblito suizo de Verbier, colindante con la zona de 4 Vallées, una agrupación de cuatro estaciones de esquí del Cantón del Valais, cerca del Lago de Ginebra, está situado a 1,500 metros de altura, en medio de los Alpes suizos. Este sitio tradicional con típicos chalets de madera y vacas lecheras sonando sus campanas, es el gran secreto de muchos famosos, pero el turista común también puede conocer la vida genuina de esta montañas.
Verbier también es perfecto si buscamos buen esquí, pues está rodeado de fabulosas montañas nevadas, tanto en invierno como verano. El lugar es muy privado, con la naturaleza más pura. Más de 400 kilómetros de pistas interconectadas hacen que Verbier y 4 Vallées formen ?la meca? del esquí suizo, especialmente para deportistas de alto nivel técnico, o para los amantes de las peligrosas ?pistas negras?, el esquí extremo, el cross country, el excitante paragliding y el freeride. En este pueblo la nieve mantiene una textura ?de polvo? por más tiempo que otros lugares de los Alpes, lo que es ideal para quienes buscan el esquí en su estado más puro.
Estando allí tienes que visitar el mirador del Mont Monfort, a 3,500 metros de altura, con una vista divina de los Alpes, y las tres famosas montañas Montblanc, el Monte Rosa y el Matterhorn. En el pueblito se practica un esquí más sencillo e informal, como le gusta a los jóvenes y deportistas que prefieren todo más distendido. Verbier no es tan sofisticado como St. Moritz o Gstaad, pero es un sitio más relajado, donde la práctica es lo más importante. Gloriosamente internado en impresionantes ambientes naturales, es ideal para descansar mientras nos rodean las montañas y millas de nieve. Por supuesto, en Montreux-Vevey, a una hora de Verbier, hay también restaurantes y hoteles excelentes. Si quieres conocer el elegante balneario invernal de Zermatt y recorrer sus tiendas, en dos horas puedes llegar allí.
Gastronomía de altura
En Verbier hay divertidos pubs y bares como The Farm Club, Pub Mont Fort y Lefarinet, así como restaurantes donde hacen un raclette divino (queso suizo de la zona de Bagnes, recién derretido y servido con patatas hervidas y vino blanco seco) y un fondue delicioso, como en Le Caveau Restaurant. Puedes ir Fer à Cheval para tragos y pizzas, La Channe Valaisanne y Le Carrefour. En las propias pistas puedes comer en la Cabane du Mont Fort sopas calientes y sándwiches; en Au Mayen; o en La Marmotte.
Visitantes de lujo
La zona es la favorita de una gene- ración joven de aristócratas y chicos ingleses de clase alta y personalidades de la realeza y el jet set, como los príncipes Harry y William de Inglaterra, Kate Middleton, las princesas Beatriz y Eugenia de York, Victoria y David Beckham, Hugh Grant y Jemima Goldsmith. Además, el legendario Sir Richard Branson tiene un lujoso hotel de nueve suites llamado The Lodge, donde sus hijos reciben a sus amistades cercanas. Otros famosos que adoran visitarlo son los príncipes de Dinamarca, Federico y Mary, quienes llevan años esquiando allí; al igual que Sarah, duquesa de York; así como los cantantes James Blunt y Phil Collins.
Cómo y a dónde llegar
Verbier está a 156 kilómetros del aeropuerto de Ginebra, desde donde se llega en auto en dos horas. Ahí hay una combinación de tren y autobús, que en tres horas te lleva allí. Para hospedarte, los hoteles e inns tienen arquitectura alpina típica, como el Chalet d?Adrien (25 habitaciones, lujoso, con cinco estrellas), y el fabuloso W; el Kings Parc Hotel, y el moderno Nevai. Otras opciones más económicas son el Central Hotel Verbier, el Mirabeau y el Montpelier.
Toma el paseo en tren por los Alpes. El Glacier Express tarda siete horas y media y cruza 291 puentes, 91 túneles de montañas y siete valles espectaculares.
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