Leyendas y castillos en Escocia

Leyendas y castillos en Escocia

Un país enigmático, marcado por innumerables leyendas y con pueblitos congelados en el tiempo

Estando en Londres puedes hacer cortos tours. El de Escocia es fabuloso, pues es uno de los países que forman el Reino Unido (junto con Gales, Inglaterra e Irlanda del Norte) y tiene mucho interés para los turistas desde que se puso de moda hace unos años, cuando Madonna se casó allí con Guy Ritchie. De Londres puedes tomar el tren y hacer el viaje por cuenta propia, aunque es popular y fácil conocer Escocia en excursiones organizadas en autocar con guía, saliendo y regresando de Londres. El centro de mis operaciones en Escocia siempre ha sido Edimburgo -llamada “la Atenas del Norte"-, desde donde puedes ir a conocer sus alrededores.

DIA 1. Tren de Londres a Edimburgo (4 horas); pronto te impactarán los paisajes muy verdes de Escocia. Una canción folclórica escocesa dice Will ye no come back again? (¿No regresarás de nuevo?) y camino a Edimburgo es imposible decirle que no a Escocia, marcada por innumerables leyendas de monstruos, brujas y apariciones, que encontramos en lagos y viejos castillos en ruinas, igual que pueblitos que parecen haberse quedado “congelados” en el tiempo. También es un paraíso de golf y tiene hoteles con campos maravillosos, además de que ofrece una cultura celta interesantísima; bellas telas escocesas a cuadros o tartans (cada clan escocés tiene el suyo); el famoso whisky del que están muy orgullosos y esas divinas gaitas cuya música emociona profundamente.

Edimburgo -una ciudad fortificada hace más de 2 mil años- se alza en siete colinas. Sentirás enseguida el impacto de su ambiente, y verás en lo alto la silueta del castillo de Edimburgo “reinando” sobre la ciudad día y noche. Estamos en la tierra de Robert Burns, de sir Walter Scott y de viejas abadías y castillos llenos de misterio. Para disfrutar esa atmósfera puedes hospedarte en el boutique hotel The Howard, de cinco estrellas, exquisito y discreto, con 18 habitaciones al estilo georgian, y mayordomos a tu servicio. También están el hotel Missoni, moderno y chic, y The Caledonian, grande y estilo palacio.

La ciudad tiene un tamaño ideal para caminarla (con zapatos cómodos, por sus calles adoquinadas), comenzando en The Royal Mile, llena de tiendas, y recorriendo la parte vieja (Old Town) y sus fascinantes callejuelas, incluyendo Victoria Street con sus antigüedades. También hay un tour hop-on hop-off que va a todas las atracciones, como por ejemplo Grassmarket, con partes de las murallas originales de la ciudad; el puente George VI, la Biblioteca Nacional, el Kirk de los Greyfriars, el Museo Real de Escocia, el viejo Parlamento, el enorme puente que llaman la Catedral de Hierro y un sinnúmero de construcciones de todos los estilos arquitectónicos desde el siglo XII hasta nuestros días, incluyendo el palacio de Holyrood, la residencia oficial de la familia real en Edimburgo. La ciudad fue nombrada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO debido a sus más de 16 mil edificios de importancia arquitectónica e histórica.

Esa noche puedes cenar en el hotel, en el pequeñito The Atholl, que está entre los mejores de la ciudad (nunca olvidaré sus Ravioli de espárragos y setas y Tarta de limón con whisky escocés). ¡O puedes hacer un tour a pie que busca “los fantasmas” de la Ciudad Vieja!

DIA 2. Lo pasarás completo en el fabuloso tour a Loch Ness, Highlands y Stirling. Los guías explican las leyendas que son la “esencia” del país, incluyendo la del mítico monstruo de las aguas del enorme lago Loch Ness (¡llamado Nessie por todos!) y las ruinas del castillo de Urquhart a sus orillas. También conocerás Inverness, capital de las tierras altas o Highlands. El verdor del paisaje y cierta cosa “salvaje”, dentro de lo apacible, es lo que siempre me ha impresionado en Escocia y ese día lo apreciarás. En la capilla real del castillo Stirling fue coronada María Estuardo. Esa noche puedes cenar en el pintoresco Beehive Inn, en un albergue de viajeros ¡de hace 400 años!

DIA 3. Tour a St. Andrews-Kingdoms, Palaces & Golf Tour. Conocerás St. Andrews, “hogar” del golf, además de preciosas playas y palacios, y la universidad donde se conocieron el príncipe William y Kate Middleton.

DIA 4. Visita en Edimburgo a los salones del palacio de Holyrood, antiguo monasterio del siglo XII, con torres en punta y la espectacular montaña Arthur?s Seat al fondo. La familia real prefiere el palacio de Balmoral y usa Holyrood solo para ceremonias oficiales. Después del almuerzo puedes tomar una excursión a Hopetoun House, un ejemplo de las antiguas mansiones, y a las ruinas del Palacio Linlithgow, donde nació María Estuardo, reina de Escocia.

DIA 5. Con auto con chofer, visita el bello Castillo Glamis, a dos horas en auto de Edimburgo y usado por Shakespeare en su drama Macbeth. Aquí creció la reina madre Elizabeth Bowes-Lyon, pues su padre era lord Glamis, y puede visitarse su colección de objetos personales. Luego puedes ir al castillo de Balmoral, donde la familia real pasa sus vacaciones de verano, y de ahí, a una hora en auto, al hotel Gleneagles para tomar el té y conocer su campo de golf. En este momento puedes regresar a Edimburgo u hospedarte en Gleneagles y hacer otros tours.

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