Con una rica historia escrita en su arquitectura y sus calles, esta bella ciudad tiene mucho que ofrecer a sus visitantes
Le llaman La Bella del Sur y es una de las ciudades más antiguas, históricas y encantadoras de los Estados Unidos. Considerada la capital de Carolina del Sur, está situada en la costa del Atlántico, al norte de la también muy histórica ciudad de Savannah, Georgia, y apenas a hora y media en avión de Miami. Originalmente conocida como Charles Towne, fue establecida en 1670 por inmigrantes irlandeses, escoceses, alemanes, hugonotes y judíos sefarditas, y es un tesoro cultural que vale la pena descubrir.
Aunque en épocas coloniales Charleston fue una ciudad rica, considerada centro de negocios y puerto internacional (¡el fabuloso personaje de Rhett Butler en Lo que el viento se llevó era oriundo de allí!), a través de los siglos sufrió numerosos incendios, ataques de indios, piratas y hasta devastadoras guerras (como la Guerra Civil Norteamericana) que fueron destrozándola. Después de años de descuido, algunos ciudadanos orgullosos comenzaron a rescatarla y el Charleston del nuevo milenio es tan charmant como lo fue en su época de oro a finales del siglo XVII.
Parte de su gran atractivo es esa atmósfera de ciudad con historia que nos transporta a siglos pasados, y también la amabilidad de su gente, muy hospitalaria y educada. Todos dicen “buenos días”, te sonríen como si fueran tus amigos de toda la vida y siempre dan las “gracias”, ¡algo raro para quienes venimos de Nueva York! Detrás de las ventanas de las reconstruidas casas coloniales, imaginamos un mundo más gentil y mucho menos acelerado del que a diario vivimos.
FOTOGALERÍA: EL ENCANTO SUREÑO DE CHARLESTON
El turista puede conocer Charleston por aire, en globo aerostático; por mar, en barco; o por tierra, ya sea en un autobús turístico, trolley, un coche tirado por caballos (¡como en la época de Rhett Butler!) o caminando. Es fácil caminar por esta ciudad. Una buena idea es comenzar viendo la presentación Forever Charleston (en el Visitor Reception Center) y allí obtener una copia de un magnífico tour a pie de la ciudad: The Complete Walking Tour of Historic Charleston, que te muestra cómo recorrer el barrio histórico, conocer sus influencias arquitectónicas a través de los siglos y sus muchas edificaciones legendarias, incluyendo algunas casas construidas en lotes pequeñísimos, ¡del ancho de una habitación!, igual que las pequeñas plazas características de la ciudad.
Entre las más interesantes casas históricas abiertas al público se destacan: Edmonston-Alston House, Aiken-Rhett House; Nathaniel Russell House; Joseph Manigault; Heyward Washington House y Calhoun Mansion. Son como pequeños museos que muestran un estilo de vida de siglos atrás. Visita al menos una.
Si prefieres moverte en autobús, algunos salen del propio Visitor Center, aunque la Gray Line te recoge en el hotel y te muestra las atracciones más importantes. El distrito histórico de Charleston es fabuloso, no importa cómo lo recorras. Aunque disfruté enormemente visitándolo a pie, me gustó mucho el recorrido de 50 minutos en coche tirado por caballos del Carolina Polo & Carriage Company, operado por miembros de viejas familias de Charleston, quienes conocen como nadie los detalles, los chismes y las viejas anécdotas de la ciudad.
Llamada también La Ciudad Sagrada, debido a la enorme cantidad de iglesias que tiene, en el Charleston de hoy hay bellas zonas nuevas con jardines llenos de rosas, azaleas y camelias, y el musgo le da un toque misterioso y muy romántico. Conoce The Market con una combinación de edificios históricos junto al Museo de la Confederación y un área repleta de tiendas, boutiques, restaurantes y artesanías. También me encantó Middleton Place, una plantación fundada en 1741 con los jardines más antiguos de América. Y Magnolia Plantation and Gardens, muy hermosa.
Parte del encanto de un viaje a Charleston es hospedarse en alguna de las antiguas mansiones convertidas en hoteles. Entre las más elegantes tenemos: Planters Inn, en la zona histórica; la encantadora Governor?s House; el lujoso The Restoration On King y el premiado French Quarter Inn. También son excelentes los hoteles del casco histórico, como Holiday Inn, Embassy Suites y Renaissance.
Los tours culinarios son igualmente famosos. En Charleston se come muy bien. La mayoría de los hoteles tienen restaurantes gourmet. Algunos favoritos: Magnolia?s (cocina americana y europea), Husk (cocina sureña moderna), The Ordinary (mariscos), The Glass Onion (un brunch espectacular), Charleston Grill (muy finos) y Fig (cocina inspirada en la estación).
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