Prueba a prepararlos de diferente manera y reconcíliate con ellos. ¡Te encantarán!
Cuando seguimos una dieta para perder peso, pocos alimentos son tan necesarios y tan vitales como los vegetales. Es muy curioso cuando muchos, que no saben comerlos y los rechazan sin razón, afirman: “No me gusta comer vegetales”, o “No tienen mucho sabor y me resultan aburridos”. Te interesa: Cómo sustituir proteínas animales por vegetales Un tip perfecto para disfrutarlos y descubrir sus sabores es ¡comerlos calientes! Tomates asados al horno, cebollas y ajos cortados en trozos y sofritos en agua y unas gotitas de aceite de oliva; calabacines (zucchini), espárragos y berenjenas a la parrilla con especias... ¡la lista de las maneras de cocinarlos es interminable! Los vegetales calientes, con una pizca de sal y pimienta para acentuar su sabor, son mucho más apetitosos y, al obtener una textura crujiente, las personas que están a dieta los comerán con más entusiasmo.