Si pasas varias horas al día frente a un monitor, te invitamos a leer esto. Tus ojos te lo agradecerán
Cuando tu trabajo en la oficina incluye, de una u otra forma, trabajar en la computadora, es común que experimentes fatiga visual, lo que se puede traducir en dolor de cabeza, enrojecimiento de los ojos, resequedad, lagrimeo o pérdida de enfoque.
Un reciente estudio realizado por la división de Electrónica de Consumo del Consejo de Visión de Estados Unidos reveló que las mujeres son más vulnerables que los hombres a sufrir esta condición: el 70% de la población femenina en ese país ha experimentado fatiga visual, frente a un 60% de hombres norteamericanos. El reporte se basó en una encuesta a 10,000 estadounidenses, pero en México quizá la situación no sea tan diferente, sobre todo si consideramos que las condiciones laborales, incluso las actividades lúdicas y de comunicación, nos obligan a permanecer conectados a todo tipo de dispositivos electrónicos.
Los expertos en salud visual recomiendan llevar a cabo una serie de medidas para no sufrir los estragos de la fatiga. Conócelas y ponlas en práctica desde ya:
1. La distancia entre tu rostro y la computadora debe ser la idónea ¿cómo saberlo? Estira el brazo y la palma de tu mano deberá tocar el monitor
2. Evita que luces o superficies reflejantes afecten la visibilidad de la pantalla. Cambia de lugar lo que sea necesario para evitar que te deslumbre
3. Agranda la pantalla de tu procesador de textos o utiliza el zoom para ver en gran tamaño las fuentes de tus documentos. No olvides que el brillo de la pantalla también es importante: mantenlo brillante, pues de esa forma la pupila se contrae e incrementa el rango de enfoque
4. Procura descansos por periodos: toma por cada 20 minutos un descanso de 20 segundos. La idea es que observes cualquier objeto a una distancia considerable (mínimo seis metros) y fijes la mirada en él, esto hará que el músculo focal se relaje
5. Usa lentes con tratamiento antirreflejante, ya que ofrecen mayor nitidez frente a la computadora. Y, desde luego, no trabajes por las noches con la luz encendida porque eso agrega muchísima tensión a la vista
Tus compromisos laborales son muy importantes pero también lo es tu salud, crea el entorno visual más cómodo para estar listísima y empezar tu día.
