Dicen que los 40 son los nuevos 30, ¿será cierto? Lo que sí es seguro es que, a partir de esta etapa, es importante asegurarnos de obtener los nutrientes necesarios para mantener nuestro cuerpo en óptimas condiciones. Entre estos nutrientes esenciales se encuentra la vitamina A, un poderoso antioxidante con numerosos beneficios para la salud.
Naturalmente, ¿qué es la vitamina A?
Según Clínica Mayo: “La vitamina A (retinol, ácido retinoico) es un nutriente importante para la visión, el crecimiento, la división celular, la reproducción y la inmunidad. También tiene propiedades antioxidantes. Los antioxidantes son sustancias que pueden proteger las células contra los efectos de los radicales libres, es decir, moléculas generadas cuando el cuerpo descompone los alimentos o cuando se lo expone al humo de tabaco y a la radiación. Los radicales libres podrían influir en las enfermedades cardíacas, el cáncer y otras enfermedades”.
En otras palabras, la vitamina A es importante para el crecimiento y el desarrollo, para el mantenimiento del sistema inmunitario y para una buena visión. Tiene funciones clave en el desarrollo del sistema inmunitario, la formación y mantenimiento de las células de la piel y las mucosas, el crecimiento y la visión. Además de sus propiedades antioxidantes.
Qué alimentos tienen Vitamina A
Naturalmente existen dos fuentes diferentes de vitamina A, según National Institutes of Health:
- La vitamina A preformada: Ésta se encuentra en el pescado, en las vísceras (como el hígado), los productos lácteos y los huevos.
- Los carotenoides provitamina A: Estos, en el cuerpo, se transforman en vitamina A. Los encuentras en las frutas, las verduras y otros productos de origen vegetal. El carotenoide provitamina A más común en los alimentos y los suplementos dietéticos es el betacaroteno.
La ingesta recomendada de vitamina A para adultos es de 700-900 μg/día
La vitamina A se erige como un aliado fundamental para el bienestar de las personas mayores de 40 años. Su potente acción antioxidante ayuda a combatir los radicales libres, previniendo el daño celular y retardando el proceso de envejecimiento.
Incorporar alimentos ricos en vitamina A a su dieta, como papas, espinacas, zanahorias e hígado, puede ser una estrategia eficaz para aprovechar al máximo sus beneficios. Además, considere consultar con un profesional de la salud para determinar si la suplementación con vitamina A es adecuada para usted.