Más allá de la quimioterapia: nuevas opciones para el cáncer de mama

Nuevos tratamientos, prácticas que reduzcan los riesgos y avances tecnológicos son esenciales para ganarle la batalla. Esto es todo lo que debes saber.

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La lucha contra el cáncer de mama ha experimentado avances significativos en los últimos años.

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Aunque se han logrado avances significativos en la sensibilización del cáncer de mama, lo cierto es que continúa siendo el más frecuente en nuestro país, y es que cada año se suman 27,500 casos, de acuerdo con el Instituto Nacional de Geografía y Estadística. No bajar la guardia es una muestra de amor hacia nosotras mismas y las mujeres más importantes de nuestra vida, por ello es vital mantenernos informadas. Éstos son algunos de los hallazgos científicos más esperanzadores contra el cáncer de mama.

¿Qué hay de nuevo contra el cáncer de mama?

1) Inteligencia artificial

¿Sabías que gracias a ella ya se puede detectar de manera eficiente y rápida pequeños tumores en mastografías o tomografía axial computarizada? De hecho, Regina Barzilay, profesora del MIT y superviviente de cáncer de mama, dirige un trabajo que desarrolla algoritmos para predecir si es probable que una paciente desarrolle cáncer de mama en los próximos cinco años. Su modelo detecta pequeños cambios en la mastografías que se convierten en tumores.

2) Biopsia líquida

Es tan eficiente como la convencional pero tiene más ventajas: no es invasiva, se puede aplicar a pacientes no aptos para biopsia y permite un diagnóstico molecular más completo y precoz de la enfermedad. Con ella se puede seguir la respuesta del tumor al tratamiento e incluso detectar si vuelve a aparecer.

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Además de la autoexploración y la mastografía, hay más estudios.

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3) Terapias dirigidas

Se está haciendo un espacio junto con la quimio, la radioterapia y la cirugía. Se trata de fármacos que atacan directamente la alteración molecular del tumor.

4) Inmunoterapia

Son medicamentos capaces de activar las defensas del paciente, sobre todo los linfocitos, pero no actúan contra la célula tumoral. En este sentido, destacan las terapias celulares avanzadas con células CART y las terapias de linfocitos infiltrantes de tumor o TIL, que modifican o manipulan el sistema inmunológico. En la Universidad de Cardiff, Reino Unido, existe un tratamiento que se enfoca en extraer las células T del paciente con cáncer y reprogramarlas para poder detectar el padecimiento. Las células mejoradas se cultivarían en laboratorio y luego se inocularían en el paciente, lo que ofrece expectativas positivas.

5) Vacuna

La Clínica Mayo investiga una vacuna contra la proteína HER2+, que se encuentra en la mayoría de las mujeres con carcinoma ductal in situ (tipo que se detecta en una zona concreta y que no es grave, pero alerta sobre un posible cáncer invasivo en el futuro), uno de los más frecuentes. Esto ayudaría a detectar células precancerosas o anormales y el sistema inmunitario las desecharía.

Mujeres con y sin antecedentes de cáncer de mama deben realizarse la mamografía a partir delos 30 o 40 años, dependiendo el caso de la paciente

La combinación de tecnología avanzada con prácticas médicas efectivas es clave para enfrentar el cáncer de mama.

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6) Radioterapia intraoperatoria

Intrabeam es un dispositivo desarrollado por el University College of London para aplicar radioterapia tras la extirpación de un tumor. Luce como una bola y se coloca justo donde estaba el tumor. Una que vez suministra la dosis de radioterapia se retira y se cierra la herida. Evita tener que ir al hospital a tomar sesiones posteriores de radioterapia. Reduce los efectos de la radiación y mejora la recuperación del paciente.

7) Combinación de medicamentos

Investigadores de la Universidad de Basilea demostraron que la mezcla de Trametinib y Rosiglitazone transforma las células de cáncer de mama en grasa inofensiva en ratones de laboratorio en los que habían injertado tumores triple negativo, los más agresivos. Un estudio que ofrece esperanza a futuro.

La lucha contra el cáncer de mama continúa, pero los avances científicos nos brindan cada vez más herramientas para combatir esta enfermedad. Aunque la quimioterapia sigue siendo importante en muchos casos, las nuevas opciones de tratamiento ofrecen esperanza y mejores resultados para las pacientes.

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