A sus 56 años de edad, Nicole Kidman aparenta muchos menos años de edad los que realmente tiene y esto se debe a que la actriz no ha cesado en la disciplina que implica mantener un estilo de vida equilibrado.
A pesar de tener una apretada agenda, la protagonista de Las mujeres perfectas (2004) siempre se ha dado tiempo para planear minuciosamente sus entrenamientos y para poner en orden los alimentos que consume durante la semana y así lograr tener un físico envidiable.
De acuerdo a lo revelado por la actriz, en la edición australiana de una revista especializada en salud y fitness para mujeres, los trucos para mantenerse radiante y tonificada residen principalmente en llevar una dieta nutrida.
Bebidas espumosas de café, las aliadas estrellas de Kidman
Como varios retratos captados por paparazzis lo comprueban, Nicole Kidman disfruta de salir a dar paseos y acompañar su caminata con bebidas compradas en famosas cadenas de cafeterías.
Saliéndose del canon que indica que las bebidas de café sin ningún complemento son las más adecuadas en los regímenes de pérdida de peso, Nicole Kidman ha revelado que prefiere consumir preparaciones con leche, donde la espuma predomine más que el café, para evitar la tentación de consumir postres o de complementar su bebida con endulzantes para contrarrestar el sabor amargo.
Nicole Kidman es fanática de los mariscos
Haciendo honor a su ciudadanía australiana, Nicole ha colocado como protagonistas de su dieta a los diferentes tipos de mariscos, como langosta, camarones y filetes magros de pescado. Gracias a los grandes aportes de proteína de estos alimentos, Kidman ha logrado mantener su masa muscular intacta y verse tonificada todo el tiempo.
Las verduras, otro básico de Kidman
Volviendo a los básicos, la también productora ha confesado que el consumo de una gran cantidad de verduras forma parte de sus claves para permanecer esbelta. También ha detallado que aunque procura comer vegetales y alimentos saludables el 80% del tiempo, deja otro 20% libre para cuando tiene que ceder ante antojos de comida chatarra, comprobando su humanidad, pero reforzando lo fácil que es mantenerse en forma con un poco de planeación y disciplina.