El café se puede disfrutar de muchas formas, negro, con leche, frío, caliente, capuchino y un sinfín de opciones que conocemos gracias a las cafeterías. Sin embargo, una nueva manera de tomar esta bebida está surgiendo y ha llamado bastante la atención, ya que se trata de ponerle una pizca de sal a una taza de café.
¡Sí, leíste bien! Esta nueva tendencia consiste, literalmente, en echar sal al café. Y aunque sabemos que con tan solo leerlo ya suena raro, probarlo sería una experiencia desagradable.
No obstante, algunos expertos han estudiado el tema desde hace años e indican que, contrario a lo que se pudiera pensar, este mineral puede ayudar a potenciar el sabor del café por una singular razón, (y la cual puede tener sentido cuando te lo expliquemos).
¿Por qué ponerle sal al café ayuda a mejorar su sabor?
El sabor amargo del café proviene, en un pequeño porcentaje, de la cafeína. Aunque la mayoría de su amargura se produce por dos compuestos: las lactonas del ácido clorogénico y los fenilindanos.
Y es precisamente aqui donde entra la sal, ya que el cloruro de sodio neutraliza principalmente esa amargura del café, permitiendo además que otros elementos resalten su sabor, según un estudio publicado en Nature.
Aunque esta investigación no es la única que sugiere lo mismo, ya que el estudio ‘Supresión del amargor por el sodio: variación entre los estímulos del sabor amargo’, publicado en 1995, demostró que la sal enmascara el sabor fuerte del café.
“La sal es efectiva para enmascarar el sabor amargo ya que al añadirla a una mezcla de compuestos dulces y amargos, hace adquiera un sabor acaramelado”, de acuerdo con dicha investigación.
Por otro lado, el barista, youtuber y consultor de café James Alexander Hoffmann, también explicó algo parecido. “Nuestra lengua tiene receptores del gusto que detectan iones del sodio y nos permiten experimentar el sabor salado. Esa salinidad también amplifica el dulzor y reduce el amargor, lo que explica por qué agregar una pizca de sal puede mejorar enormemente el sabor del café", comentó el experto.
Hoffman es uno de los baristas más reconocidos en Gran Bretaña, por lo que se ha convertido en toda una autoridad en esta bebida.
Aunado a lo comentado por el barista inglés, Sara Marquart, quien es jefa de sabor en el centro de ciencia, tecnología e innovación en The Coffee Excellence Center, dijo que “la adición de sal en el café amortigua la amargura sin usar otros aditivos”, por lo que “la sal resalta naturalmente la dulzura del café y mantiene los aromas agradables”.
Con esto, podemos deducir también por qué la sal es bastante utilizada en la reposteria, ya que suele agregarse frecuentemente unas pizcas de sal en muchos postres para potenciar su sabor.
