El envejecimiento es un proceso natural que en algún momento nos alcanza. Las características principales de estos cambios son físicos, ya sea a nivel celular, tisular y orgánico, que se ven reflejados en la postura, la forma de caminar y en los malestares que conllevan.
No obstante, a pesar de que estos cambios son inevitables, es posible prevenir problemas graves que aparecen debido a estos malestares. A continuación, te explicamos de qué se trata todo esto y cómo puedes prevenirlo.
Los cambios en el envejecimiento
El esqueleto es una de las partes del cuerpo humano que tiene grandes cambios a la hora de envejecer. Medline Plus explica que es precisamente esta la razón por la que las personas de la tercera edad comienzan a encorvarse, pues el esqueleto proporciona apoyo y estructura al cuerpo. Asimismo, las articulaciones, las zonas donde se unen los huesos, pierden flexibilidad para el movimiento.
Otros factores para considerar son la pérdida de masa o densidad ósea conforme avanza la edad. Este cambio es más notorio en mujeres después de la menopausia. Así como la pérdida de la estatura debido al cambio del arco de los pies.
La visión también se ve afectada. Según el Manual MSD, a medida que las personas envejecen, se pierde la capacidad de enfoque de objetos cercanos, la visión en lugares oscuros, la retención de los colores, los cambios de luz y una sensación de resequedad ocular.
Estas son las etapas del envejecimiento
El portal de Teleasistencia Vital, un sitio de asistencia preventiva para personas mayores, destaca las etapas de la vejez con el fin de que las personas se enfrenten a estos cambios de la vida de forma positiva y proactiva. Según describen, el envejecimiento pasa por las siguientes fases:
- La preparación (50 a 60 años): prevenirse emocional y físicamente para los cambios.
- La jubilación activa (60 a 70 años): hay tiempo de dedicar a actividades nuevas.
- La jubilación plena (70 a 80 años): una oportunidad para mantener la mente ocupada con libros, actividades recreativas y hasta viajar.
- La vejez avanzada (90 años): el autocuidado es fundamental a través de los profesionales de la salud y la familia.
Cómo prevenir los problemas del cuerpo en el envejecimiento
Debido a estos cambios en el cuerpo de una persona que enfrenta al proceso del envejecimiento, existen mayores probabilidades de que se compliquen los malestares y, como consecuencia, haya problemas más graves a lo largo de los años.
“El ejercicio ayuda a que los huesos permanezcan fuertes”.
Expertos subrayan que los malestares más comunes son la osteoporosis, dolor muscular, riesgo a lesiones, y contracturas musculares.
Por ello, para prevenir la mayor cantidad de malestares posibles y vivir una vejez plena, recomiendan hacer ejercicios moderados para mantener la fuerza, el equilibrio y la flexibilidad, así como llevar una dieta equilibrada con suficiente calcio. Las mujeres mayores, en particular, necesitan mayor ingesta de calcio y vitamina D.
“El ejercicio ayuda a que los huesos permanezcan fuertes”, destacan.
Recuerde que la mejor forma de prevenir cualquier malestar hoy y en el futuro, la mejor forma es consultar a un especialista de la salud para que proporcione un diagnóstico personalizado.
