¿Pasaste mala noche tras el eclipse? Lejos de creencias populares, existe una razón para, tras el eclipse solar del 8 de abril, sentir algunos cambios de comportamiento como insomnio, ansiedad, angustia, melancolía y confusión. Es algo común y tiene una explicación.
De hecho, para ilustrar la relación de los fenómenos astronómicos con el sueño, existe un estudio que notó alteraciones en el patrón de dormir, durante las noches de luna llena. Un artículo publicado por investigadores de la Universidad de Basilea, en Suiza, encontró una interesante correlación.
El estudio se realizó en un laboratorio, con 33 voluntarios, quienes en noches de luna llena tardaron cinco minutos más quedarse dormidos, en total durmieron 20 minutos menos de lo normal y pasaron 30 por ciento menos de tiempo en sueño profundo, reportó la BBC.
Mala noche por el eclipse solar
Si notas rastros de cansancio en las caras de tus familiares, tus compañeros de trabajo bostezan un poco más y tú misma sentiste que no descansaste lo suficiente, la razón puede estar en los astros ¿será cierto?
La prensa internacional ha titulado al fenómeno como “enfermedad del eclipse”, y sus síntomas incluyen dolores de cabeza, fatiga, cambios en los ciclos menstruales e insomnio. Claro está, que si viste al sol de manera directa el problema es completamente diferente y lo más recomendable es ir al doctor.
Si experimentas síntomas relacionados a la “enfermedad del eclipse”, te tenemos que decir la verdad: no existe evidencia científica de que los eclipses puedan afectar físicamente a las personas. Sin embargo, tampoco podemos negar que los ritmos naturales del cuerpo y la mente pueden ser alterados tras la alineación de la Tierra, la Luna y el Sol.
Leann Poston, médica, escritora e investigadora de Invigor Medical, dijo a Daily Mail comentó que no ve un vínculo entre el eclipse y los cambios en la fisiología, pero puntualiza que, “cuando ocurre un evento que está fuera de la norma y parece difícil de explicar, esto puede provocar un aumento del cortisol, lo que puede tener efectos físicos y psicológicos”.
En otras palabras, aunque no existe una causa científica concluyente, muchas personas experimentaron sueños raros, durmieron menos o se sintieron alterados desde las noches previas. Y eso no se puede negar. Como tampoco se puede negar que en redes sociales y algunos medios se divulgó información un tanto alarmista sobre el impresionante fenómeno natural del 8 de abril. Literal, se eclipsó la belleza del suceso con falsas creencias y malos augurios.
¿Cómo no dormir menos ante tantas notas y mensajes negativos? Quizá el problema no está en los astros, sino en la tierra ( y específicamente en los humanos que la habitamos). De hecho, sobre lo que sí existen estudios sobre cómo la mala información digital afecta la calidad del sueño.
Si tras el eclipse, pasaste mala noche, existen varios remedios y rituales que te pueden ayudar a mejorar tu sueño. Tal vez pronto tengamos una información científica que explique el fenómeno, mientras tanto, no te pierdas nuestras recomendaciones para asegurarte de tener un buen descanso durante la noche del eclipse (y todas las demás).