En la búsqueda de un acercamiento natural hacia nuestra alimentación, ha tomado fuerza el crudismo, una corriente de moda que implica todo un estilo de vida y se basa en consumir alimentos crudos. ¿Has oído la frase “los alimentos son tu medicina”? Se trata de una afirmación cierta, pero, así como la comida puede hacerte sentir bien, también pueden ser tu veneno.
Considerado como el Raw Chef más influyente del Reino Unido, Russell James comenta que su plan de alimentación comenzó con una búsqueda personal: “Durante mi adolescencia y mi vida adulta temprana, sufrí de acné y buscaba desesperadamente una solución. La medicina convencional realmente no me proporcionó las respuestas que buscaba. Así que en 2004 probé comida cruda y vegana y no sólo mi piel mejoró, sino que me sentí mucho mejor. Nunca miré atrás”.
Qué es el crudismo
En el mundo de la nutrición, el crudismo, también conocido como alimentación viva o raw food, ha ganado popularidad en los últimos años. Esta dieta se basa en el consumo de alimentos sin cocinar o procesar mínimamente, con la premisa de preservar sus nutrientes y enzimas naturales para una mejor salud.
A este tipo de alimentación también se le conoce como crudivorismo o crudista y se basa en el consumo de alimentos sin cocinar y sin procesar, o con un procesamiento mínimo. Menospreciando años de evolución, los adeptos a esta corriente creen que al cocinar los alimentos por encima de cierta temperatura se pierden muchos de sus nutrientes.
Las frutas y verduras crudas contienen enzimas digestivas (amilasas, proteasas y lipasas) que pueden ayudar a una mejor digestión. En otras palabras, proporcionan vitaminas, minerales, grasas saludables y proteínas.
Cuáles son los tipos de crudismo que existen
Dentro del crudismo existen diferentes variantes que se diferencian por los tipos de alimentos que incluyen:
- Frutariano: Se basa en el consumo exclusivo de frutas y verduras crudas, excluyendo otras partes comestibles de las plantas, como raíces, tubérculos y granos.
- Vegano: Esta variante incluye todos los alimentos de origen vegetal sin procesar, como frutas, verduras, frutos secos, semillas, legumbres y brotes. Los productos de origen animal, como carne, huevos y lácteos, están excluido
- Vegetariano: A diferencia del crudismo vegano, este tipo permite el consumo de algunos productos de origen animal no cocinados, como huevos, lácteos crudos y miel. La carne y el pescado están generalmente excluidos.
- Omnívoro: Esta variante es la más inclusiva y abarca una amplia gama de alimentos sin procesar, incluyendo frutas, verduras, frutos secos, semillas, legumbres, brotes, huevos, lácteos crudos, miel, carne cruda y pescado crudo.
- Carnívoro: Esta variante, menos común, promueve el consumo predominante de carne cruda y grasas animales, con un consumo limitado de frutas y verduras. Los defensores del crudismo carnívoro creen que este tipo de dieta es más natural y beneficiosa para la salud humana.
Los peligros del crudismo
Una dieta totalmente cruda puede ocasionar problemas de salud si no está bien equilibrada, debido a la dificultad de suplir todos los nutrientes necesarios, pero, más allá del balance hay un peligro latente: “La relación de patologías graves producidas por la toma de productos sin tratamiento culinario incluye la tuberculosis infantil, brucelosis o fiebres de Malta, infecciones por bacterias como ‘Campylobacter’; Listeria monocytogenes; Salmonella; ‘Escherichia coli’ (presente en las heces, o ‘Clostridium botolinum’, un bacilo procedente de la tierra, productor de una bacteria potencialmente mortal”.
- Riesgos biológicos: Consumir alimentos crudos de origen animal, como carne, huevos, leche o pescado, puede ser peligroso debido a la posible presencia de organismos patógenos como bacterias, parásitos y virus.
- Intoxicaciones alimentarias: Las carnes crudas o a medio cocer son una de las principales fuentes de intoxicaciones alimentarias, siendo la bacteria E. coli una de las más comunes.
- Enfermedades parasitarias: Consumir carne de cerdo cruda o parcialmente cocida puede provocar triquinosis, una enfermedad causada por un gusano intestinal.
- Deficiencias nutricionales: Una dieta crudivegana estricta puede llevar a deficiencias de nutrientes esenciales como vitamina B12, hierro, calcio y zinc, si no se toman las medidas adecuadas para suplirlos.
- Problemas digestivos: La carne cruda puede ser difícil de digerir para algunas personas, causando malestar estomacal, diarrea o estreñimiento.
No te dejes llevar por las modas pasajeras o las promesas milagrosas. El crudismo, como cualquier otra dieta, tiene sus pros y contras. Investiga, consulta con expertos y toma decisiones conscientes para el bienestar integral de tu salud. Si estás considerando adoptar este estilo de vida, es crucial informarte adecuadamente, evaluar tus necesidades y buscar acompañamiento profesional. Recuerda que una alimentación saludable debe ser equilibrada, completa y adaptada a tus requerimientos individuales.