La nieta de la reina Isabel logró medalla de plata en la competición por equipos del concurso completo de hípica
Zara Phillips, nieta de la reina Isabel II, se ha convertido en el primer miembro de la familia real británica en ganar una medalla olímpica al quedar en segundo lugar en la competición por equipos del concurso completo de hípica. El equipo británico -formado por Phillips, Tina Cook, Mary King y William Fox-Pitt- logró la medalla de plata al quedar detrás de los alemanes en el evento disputado en el Greenwich Park, al sur de Londres, donde contó con el apoyo de la familia real.
Zara Phillips, hija de la princesa Ana, emuló a su padre, el capitán Mark Phillips, quien obtuvo una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Múnich en 1972, un año antes de casarse con la hija de la soberana británica, y logró la plata en Seúl 1988, antes de divorciarse de la hija de la reina en 1992.
En esta ocasión, Zara Phillips, casada con el jugador de rugby Mike Tindall, contó desde las gradas con el apoyo de sus primos, los duques de Cambridge, Guillermo y Catalina, y el príncipe Enrique, además de su madre y Camilla, duquesa de Cornualles, esposa del príncipe Carlos.
La nieta de la Reina es el segundo miembro de la familia real que participa en unos Juegos Olímpicos, ya que su madre compitió en los de Montreal en 1976, también en hípica, aunque no logró medalla.
Zara Phillips, quien portó la llama olímpica en Inglaterra durante el recorrido por el Reino Unido, es tan apasionada a los caballos como su abuela la reina Isabel II, conocida por ser una excelente amazona y gran aficionada a las carreras hípicas.
En la competición de este martes en Greenwich, la joven cometió un derribo y recibió tres puntos de penalización por exceso de tiempo con su caballo High Kingdom. La hija de la princesa Ana está participando en sus primeros Juegos después de quedarse fuera de los de Atenas en 2004 y Pekín en 2008 por la lesión de su anterior montura, Toytown.
Phillips señaló antes de que comenzaran los Juegos que era “estupendo haber sido seleccionada para el equipo y estar aquí, en casa, es una gran sensación. Sólo quiero hacer lo mejor para mi equipo”.
“Los Juegos Olímpicos son el mayor espectáculo del mundo y es increíble poder estar aquí y competir por mi país”, añadió.
Respecto a la actuación de su caballo, consideró que “tiene un carácter tranquilo y pese a su inexperiencia, no se ha impresionado por la gente”.
