Definitivamente la boda del príncipe Harry y Meghan Markle marcó un antes y un después en la historia de la realeza británica, al ser este el primer enlace realizado entre un Windsor y una mujer estadounidense de origen afroamericano, que, además, solía ser una estrella de Hollywood.
Para muchos, el hito marcado por los duques de Sussex representó un acto de rebeldía con un gran valor de fondo, mientras que para otros, sólo representó una gran falta a los milenarios protocolos reales. Sin embargo, únicamente quienes estuvieron presentes en el enlace pueden dar fe de la vibra que se emanó por parte de los novios y la clase de mensaje que se interpretó a través del desarrollo del acto, por lo que algunos de quienes estuvieron invitados ya han roto el silencio al respecto.
Tal es el caso del fotógrafo veterano Arthur Edward, quien compartió recientemente ante el diario británico “The Sun” su experiencia en el enlace matrimonial de Meghan y Harry, el cual cumplió su sexto aniversario el pasado 19 de mayo.
El fotógrafo de la boda de Harry y Meghan dice que ese fue el peor evento real al que ha asistido
Arthur Edward no tuvo temor en decir pestes acerca de la boda de los duques de Sussex, asegurando que “ese día fue un día miserable”.
El fotógrafo declaró también: “puedo decirlo ahora: fue el peor compromiso real que he tenido”.
“Harry estaba decidido a mantener los periódicos alejados lo más posible”, agregó el fotógrafo, quien también explicó que la mayor parte de su trabajo tuvo que realizarla con lentes de largo alcance, a diferencia de los fotógrafos contratados por la pareja, quienes sí pudieron retratar el acto en primera fila.
“Todo se hizo con lentes largos. Tenía una lente de 800 milímetros para fotografiar a los invitados que llegaban. Los fotógrafos que contrataron para el trabajo estaban a cinco pies de distancia. Era simplemente inútil”, acotó.
El príncipe Harry y Meghan Markle “maltrataron” a la prensa el día de su boda
Edward también confesó al diario citado que según su percepción, Harry y Meghan buscaban sabotear pre mediatamente el trabajo de la prensa por lo que, incluso, no volteaban a los lentes en los momentos adecuados.
“Todo fue deliberado. No fui sólo yo. Fue toda la prensa británica. En muchos sentidos, fueron maltratados”, aseguró Edwards.
En una charla anterior con “The Sun”, el fotógrafo también lamentó no tener más la oportunidad de trabajar con Harry, enunciando: “me encantó trabajar con él. Pensé que era alguien realmente especial”.
