Tanto la vida como la muerte de Lady Di estuvieron rodeadas de enigmas, los cuales el imaginario colectivo se ha encargado de mitificar por medio de “teorías conspirativas” que apuntan a que los miembros de la Corona británica estaban dispuestos a todo con tal de que Diana no fuera feliz.
Aunque si bien el ejemplo predilecto de “sabotaje” en contra de Spencer es su sorpresiva muerte en el Puente del Ángel en París, mientras se encontraba acompañada de su amante, el magnate Dodi Al-Fayed, existe otra fascinante historia respecto a la vida extramarital de la princesa, la cual tiene como protagonista a quien fuera su guardaespaldas personal en la década de los 80’s.
Dicha teoría encuentra sus bases más sólidas en una entrevista dada por Diana a la BBC de Londres en donde relata que cuando tenía 24 o 25 años, se enamoró profundamente de alguien que trabajaba en su entorno.
“Me parecía bien dejarlo todo e irme a vivir con él. Y él me decía que le parecía una buena idea también”, aseguró la princesa en su relato, aunque sin mencionar el nombre del misterioso custodio.
¿Quién era el guardaespaldas que logró robar el corazón de Lady Di?
El enamoramiento y affair vivido entre la entonces princesa de Gales y su guardaespaldas personal sucedió exactamente en 1985, cuando Diana tenía 24 años de edad y él 38. Habían pasado solo 4 años desde su unión nupcial con Carlos, pero él ya se veía con Camilla Parker.
La identidad del hombre se ha se referenciado bajo el nombre de Barry Mannakee, quien además de ser oficial de policía en el Escuadrón de Protección Real, también era padre de dos hijos y estaba casado con una mujer llamada ‘Susan’.
Cabe señalar que un año después de que se dieran señales del enamoramiento entre él y la “Princesa del pueblo”, el oficial fue transferido al Escuadrón de Protección Diplomática en Londres por “conducta inapropiada”. Sin embargo, este no es el detalle más insólito de este romance, sino la posterior muerte repentina de Mannakee.
La misteriosa muerte del guardaespaldas que Lady Di amó
Habían transcurrido solo ocho meses después de la destitución del custodio, cuando Barry Mannakee murió repentinamente en un accidente suscitado mientras volvía a su casa en el suburbio de Loughton.
El guardaespaldas se transportaba como acompañante en una motocicleta desde la sede del Escuadrón de Protección Diplomática en la capital británica, cuando de repente, una conductora principiante, se estrelló contra el vehículo donde viajaba el amado ex guardaespaldas de Diana de Gales.
La motocicleta no pudo esquivar el golpe y Barry murió al instante. Sin embargo, lo que resultó el origen de la “teoría conspirativa” que indica que este accidente no fue fortuito recae en el hecho de que ni su acompañante ni la conductora irresponsable tuvieron lesiones graves. Además de que nunca se dijo nada acerca de un tercer auto que apareció en escena.
La única consecuencia para los terceros involucrados fue una multa por 85 libras por “conducción imprudente”, otorgada a la joven identificada como Nicola Chopp, de quien no volvió a saberse nada.