¿Dónde hubo fuego, cenizas quedan? Bueno, eso no lo sabemos a ciencia cierta, pero sí nos hemos llevado una sorpresa en voz de la extrovertida duquesa de York, quien acaba de hacer una confesión que ha dejado a muchos con la boca abierta. Y es que Sarah Ferguson aseguró que ella y el príncipe Andrés, duque de York, viven juntos en el Royal Lodge a pesar de haberse separado en 1992 y divorciado en 1996.
Dulce armonía
Así es… La misma duquesa lo dijo durante una cena con periodistas organizada por el billonario estadounidense Ernie Boch Jr., en la que bromeó sobre el hecho de vivir con su exeposo, tercer hijo de la reina Isabel. Se sabe que desde hace años, la expareja mantiene una excelente relación, la cual ambos han definido como una simple amistad, hasta el momento, aunque se ha especulado sobre una posible reconciliación. Tras años de rumores sobre que habían retomado su convivencia de forma permanente, Sarah ahora llama a Andrés como “mi príncipe, el más guapo”, tal como puede oírse en varios videos compartidos en redes sociales.
“Sí, vivo en Royal Lodge con mi príncipe, que es el príncipe más guapo de todo el mundo”, afirmó la duquesa de York.
Separados, pero juntos
Hace años, Sarah Ferguson atribuyó su divorcio a los constantes viajes del príncipe con la Royal Navy y, según contó, incluso tuvo que pasar por su primer embarazo sola porque el príncipe estaba casi siempre fuera del país. Por la cercana amistad que ha vuelto a mantener la expareja desde hace años se ha especulado con podrían pasar por el altar de nuevo, algo que sería, incluso, más escandaloso que su divorcio y que el príncipe Andrés descartó en 2010 al ser preguntado en una entrevista para Daily Mail. “No (nos volveremos a casar). Ambos estamos en un momento mejor, por lo que probablemente podamos seguir siendo amigos tan cercanos”, dijo el príncipe dos años después de invitarla a vivir con él. Fue en 2008 cuando Sarah se fue a vivir al Royal Lodge, después de que un incendio devastara su casa, y parece que hasta hoy no habría buscado otra residencia. “Si no hubiera sido por él (el príncipe Andrés), no tendría casa”, aseguró en 2011. Royal Lodge es una residencia real a cuatro kilómetros del castillo de Windsor que ocupó la Reina Madre, consorte del padre de Isabel II, hasta su muerte, y que desde 2004 es la residencia oficial del duque de York.
Su “regreso”
Al separarse del príncipe se vio afectada la reputación de Fergie, e, incluso, fue apodada entre los británicos como the duquess of Pork (la duquesa del cerdo) tras ser cazada por los paparazzi tomando el sol en topless y en actitud obscena junto al empresario estadounidense John Bryan. Eran otros tiempos y fue escasos meses después del comunicado de Buckingham en el que se anunciaba su separación y se pedía evitar cualquier intrusión de la prensa en la intimidad de los duques. Desde el año pasado también hemos visto la reincorporación de Fergie como un miembro más de la Familia Real. Recordemos que estuvo presente en la boda del príncipe Harry y Meghan Markle, algo que habría propiciado Isabel II. La duquesa de York también fue protagonista en la boda de su hija Eugenia y tras esta vuelta pública a la corte británica se ha erigido como defensora de la buena relación entre Kate Middleton y Meghan Markle en programas de televisión y revistas. Ella comparaba la falsa enemistad que los medios aseguraban entre la duquesas de Cambridge y la de Sussex con la que intentaron dibujar cuando ella era cuñada de Diana de Gales.
