Serena Williams podría haber cometido una infidencia,al revelar de forma accidental el sexo del bebé que esperan los duques de Sussex. La reina, pero del tenis, comentaba de forma cándida en una entrevista al canal E! Entertainment TV que sus padres le habían enseñado que aceptara sus errores y que no pusiera demasiada presión en ella misma. Acto seguido vino la posible indiscreción cuando inocentemente dijo que “tengo una amiga que está embarazada y que me decía “mi hija hará esto. Mi hija será así” a lo que Serena le respondió “tengo que darte algunos consejos porque, sí, yo tuve esas mismas expectativas”. La prensa británica, que está permanentemente al acecho de detalles de posibles fuentes que dejen deslizar alguna clave, se ha hecho eco de las palabras de la campeona de tenis porque es muy cercana a Meghan. Son grandes amigas y tienen contacto permanente. Tan cercana es que Serena fue la que organizó el baby shower de Meghan en Nueva York el pasado febrero.
¿Niña o niño?
Y para quienes están haciendo apuestas sobre el sexo del futuro royal baby, tendrán que esperar hasta que nazca porque hace un par de meses, la propia duquesa dijo que no quieren saber, ya que prefieren que sea una sorpresa. Quienes intentaron sacarle algún detalle que pudiera ofrecer una pista asegurándole que la forma de su barriga apuntaba en un sentido u otro, ella respondió de forma muy evasiva a esos comentarios alegando que había opiniones de todo tipo al respecto y que al final había un cincuenta por ciento de posibilidades.