En medio de la gran polémica que ha desatado la fotografía mal editada de Kate Middleton con sus tres hijos, ahora ha salido a la luz que otra imagen de la Familia Real Británica también habría sido retocada, lo cual agudiza la gran crisis de credibilidad que vive la monarquía inglesa en estos momentos.
Fue el pasado 10 de marzo cuando la instantánea que subieron los príncipes de Gales, para conmemorar el Día de las Madres en el Reino Unido, causó un gran revuelo ya que usuarios y expertos se dieron cuenta de que la imagen tenía errores de edición, lo que generó que ciertas agencias de noticias y de fotografía la eliminaran de su biblioteca de imágenes.
De hecho, este escándalo derivó que la cadena estadounidense CNN anunciara que todas las fotografías previamente emitidas por el Palacio de Kensington serían analizadas a detalle. Una medida que otros medios también han implementado y, prueba de ello, es que se ha descubierto que una foto de la reina Isabel con sus nietos ha sido alterada.
Esta fotografía de Isabel II que tomó Kate Middleton también fue manipulada
Así pues, la agencia fotográfica Getty Images examinó una imagen que fue tomada, por la misma princesa de Gales, en agosto de 2022 y publicada por el Palacio de Buckingham el 21 de abril de 2023 para honrar la memoria de la difunta Isabel II, quien habría cumplido 97 años ese día.
En esa postal vemos a la fallecida monarca, sentada en un sofá verde, junto a sus nietos; sin embargo, existen algunas inconsistencias al momento de hacer zoom, por ejemplo, ciertas partes del sillón parecen no coincidir entre sí y estar superpuestas, mientras que los espacios en negro que hay junto a George y Louis y el pelo de Charlotte también han sido editados, entre otros detalles.
De ahí que la agencia haya determinado añadir la advertencia de que esta instantánea “ha sido mejorada digitalmente en origen”. Aunque, de momento, la Casa Real Británica no se ha pronunciado al respecto.
Por otra parte, este cambio a una fotografía que ya tiene casi un año en circulación resulta inquietante para los británicos, pues esto da pie a cuestionar la credibilidad de su propia institución monárquica, ya que el hecho de que sus royals difundan fotos editadas es algo en lo que los ciudadanos parecen no estar muy de acuerdo.
Y si bien, en el caso de la reciente foto de la esposa del príncipe William, ella misma reconoció que experimentó con la edición, esta explicación lejos de aclarar la polémica solo ha generado que más personas duden de la Familia Real más famosa del mundo.