Una de las noticias que más ha estremecido a los medios de comunicación durante la segunda quincena de agosto es la posible expulsión de Windsor del príncipe Andrés, duque de York, después de que el rey Carlos III decidiera eliminar el servicio privado de seguridad que había estado proporcionando a su hermano menor desde 2022.
De acuerdo con el Daily Mail dicho cambio, el cual atenta contra la comodidad del segundo hijo de Isabel II entrará en vigor en noviembre y podría representar la antesala de la expulsión del duque de su residencia en el Royal Lodge, la cual habita desde hace más de dos décadas.
Mientras se desarrolla toda esa información, el diario británico The Mirror sacó a la luz una teoría muy insólita acerca de la posible intervención que tendría el príncipe William en la expulsión de su tío del reino.
¿Por qué se dice que el príncipe de Gales quiere intervenir en la expulsión del príncipe Andrés de Royal Lodge?
The Mirror señala que el príncipe William guarda rencor en contra del príncipe Andrés, debido a que cuando introdujo a Kate Middleton a la Familia Real, el duque de York no se mostró muy entusiasmado con la noticia.
“William ha guardado rencor durante mucho tiempo contra Andrés por no ser acogedor cuando presentó por primera vez a Kate Middleton a la Familia Real. Se dice que es William quien está presionando a su padre para que desaloje al duque de York, para que sea él y su mujer los que puedan mudarse a vivir ahí", apunta en el medio citado el experto real Richard Kay.
Kay agrega que el marido de Kate Middleton considera que su padre, Carlos III, ha sido “demasiado blando” con su tío, quien cabe recordar comenzó a perder rango dentro de la Familia Real, luego de haberse visto involucrado el caso del magnate Jeffrey Epstein y de haber sido demandado por haber cometido acoso en contra de una menor de edad, Virginia Giuffre.
De esta manera se reforzaría también el planteamiento de The Mirror que señala que los príncipes de Gales estarían interesados en pronto abandonar Adelaide Cottage, inmueble ubicado en la finca Windsor Home Park, para poder vivir en condiciones más cómodas junto a sus tres hijos, los príncipes George, Charlotte y Louis, quienes ahora estarían necesitando de más espacio para sus actividades y para alojar a un cuerpo de personal que los ayude en las labores del hogar.