El futuro educativo del príncipe George ha generado un debate entre sus padres, el príncipe William y Kate Middleton. Mientras el heredero al trono desea que su hijo de 11 años siga la tradición y asista al exclusivo internado masculino de Eton, su madre se inclina por una opción más moderna y cercana a su experiencia personal: un colegio mixto como Marlborough College, en Wiltshire, donde ella misma estudió entre 1996 y 2000.
Esta es la razón por la que Kate Middleton tendría el “corazón roto”
Según reveló la experta real Katie Nicholl a The Mirror, Kate estaría “con el corazón roto” ante la posibilidad de enviar a George a Eton, describiendo la institución como “demasiado rígida” para él. La princesa valora la importancia de que sus hijos crezcan juntos, tal como ella lo hizo con sus hermanos Pippa y James. Nicholl explicó que Kate considera que un entorno mixto, como Marlborough, ofrecería una experiencia más completa y enriquecedora para George.
Sin embargo, William tiene un fuerte vínculo emocional con Eton, donde estudió y desarrolló muchas de sus habilidades. La escuela, conocida por educar a generaciones de aristócratas y miembros de la realeza, tiene un legado que pesa en la decisión.
Aun así, la pareja podría sorprender con una elección inesperada, como ocurrió cuando William y Harry no siguieron los pasos de su padre, el rey Carlos III, quien asistió al internado Gordonstoun en Escocia. Nicholl sugirió que podría haber un cambio de paradigma en las tradiciones familiares: “Siempre existe la posibilidad de que se rompa el molde de Eton y George termine en otro lugar”.
El príncipe George actualmente asiste a Lambrook School, un colegio preparatorio en Berkshire que también alberga a sus hermanos Charlotte, de 9 años, y Louis, de 6. La decisión de inscribir a los tres en la misma institución ha brindado estabilidad durante tiempos difíciles, especialmente durante el tratamiento contra el cáncer de Kate a principios de este año.
Incluso, la misma experta en realeza destacó cómo esta rutina permitió a los niños mantener cierta normalidad: “Mientras Kate estaba en el hospital, George jugaba al fútbol con sus amigos. Esa sensación de normalidad fue crucial”.
A medida que Kate se recupera y retoma sus deberes públicos, la decisión sobre la educación de George se perfila como un hito importante, no solo para la familia, sino también para las generaciones futuras de la monarquía británica. Con un equilibrio entre la tradición y la modernidad, la elección promete ser un reflejo del enfoque único de William y Kate en la crianza de sus hijos.