En el mundo de la Familia Real Británica es muy común que entre sus miembros se pongan apodos, una dinámica que el rey Carlos III habría seguido con su nuera, Meghan Markle, cuando esta se integró a los Windsor tras casarse con el príncipe Harry.
Por ello es que el sobrenombre que el monarca le dio a la duquesa de Sussex se ha convertido en uno de los más sorprendentes y controvertidos. Aquí te contamos de cuál se trata y cuál es su significado.
¿Cuál es el mote con el que Carlos III llamaba a Meghan Markle?
Carlos, conocido por su carácter fuerte y su afición a la ecología, encontró en el tungsteno, un metal con una increíble resistencia, una forma de describir a la exactriz de Suits. Según fuentes cercanas al palacio, el rey británico le habría otorgado a Meghan el apodo de “Tungsten” (Tungsteno).
Este material, conocido por ser el metal más resistente de la tabla periódica, no solo simbolizaba la fortaleza de la duquesa, sino también la capacidad de Meghan para enfrentar las adversidades, un rasgo que, en opinión del rey, ella compartía con él mismo.
En su momento, este apodo fue interpretado como un halago ya que en una ocasión una fuente del palacio habría comentado que el monarca “admira a Meghan por su fuerza y la determinación que le da a Harry, quien necesita una figura de tungsteno en su vida, ya que puede ser un poco blando”.
Según este relato, el rey Carlos veía en Meghan una figura de apoyo para su hijo menor, el príncipe Harry, quien según la visión paterna, se beneficiaba de la firmeza y el carácter de la duquesa. Sin embargo, hoy en día, el apodo de “Tungsteno” se percibe de manera ambigua. Mientras que algunos consideran que el primogénito de Isabel II lo pensó como un cumplido para halagar al fortaleza de la exactriz, otros lo interpretan como una crítica a su carácter inflexible.
La mala relación entre Meghan Markle y la Familia Real Británica
El hecho de que el tungsteno sea un material tan resistente y, a la vez, difícil de moldear, podría sugerir que el rey veía en Meghan una persona difícil de tratar, alguien con quien las negociaciones o las conversaciones eran complicadas. Sobre todo si tomamos en cuenta el distanciamiento que existe actualmente entre la Familia Real Británica y Markle.
De ahí que podamos deducir que este apodo pudiera reflejar la relación tan tensa que hay entre los miembros del clan Windsor y Meghan. Y aunque en su momento pudo haberse considerado un apodo cariñoso, con el tiempo se ha convertido en una pieza que deja al descubierto cómo son las dinámicas dentro de esta familia.