Te contamos la historia del matrimonio austriaco que no estaba planeado
Isabel de Baviera, apodada cariñosamente como Sissi, pasó a la historia por ser una emperatriz que vivía con sencillez y humildad y por haberle “quitado” el novio a su hermana.
- La familia de Sissi
Su padre, Maximiliano de Baviera, pertenecía a una de las familias reales más “pobres” de la Casa de Wittlesbach. Su madre, la princesa Ludovica, era la hija del rey Maximiliano I de Baviera. El matrimonio de Ludovica y Maximiliano fue uno de los tantos enlaces arreglados con el objetivo de crear alianzas a través de los hijos. A pesar de que Maximiliano advertía que no amaba a su esposa Ludovica, la pareja tuvo diez hijos, dos de los cuales murieron al poco tiempo de nacer. Así, Sissi y sus hermanos pasaron su infancia en un castillo alejados de la ciudad y de todo lujo. Su padre les inculcó el amor por la naturaleza y la vida sencilla, por lo que la mayoría terminó renunciando a la ruidosa y agitada vida urbana. [Te puede interesar: La rara obsesión de Sissi, emperatriz de Austria]
- El “robo”
El 18 de agosto de 1848, Francisco José, hijo de Sofía y Francisco Carlos de Austria, alcanzó la mayoría de edad y se convirtió en uno de los hombres más poderosos de Europa pues se tomó su puesto como emperador de Austria. El joven emperador cautivaba por su elegancia, inteligencia y belleza. Por lo tanto, su madre, Sofía, buscó con gran esmero una esposa digna para su hijo. Elena, apodada Nené y hermana de Sissi, fue la elegida, pues era una jovencita elegante, educada y de buen carácter. [Te puede interesar: La realeza y sus íconos de moda: Sissi, emperatriz de Austria] Durante el verano de 1853, se planeó el viaje de Nené con la finalidad de que conociera a su futuro marido; lo hizo acompañada de su madre y de Sissi, quien estaba deprimida después de que el conde del que estaba enamorada murió. A pesar de que a la pequeña Sissi, de tan solo 15 años de edad, le pareció una tortura el viaje, accedió acompañar a su hermana para que su madre no se enfadara con ella. El emperador Francisco José, que en ese entonces tenía 24 años, estaba muy nervioso por el encuentro con su “futuro amor”. Cuando vio a las mujercitas sintió un “flechazo”, pero no hacia Nené, sino por Sissi. La espontaneidad, belleza y alegría de Sissi conquistaron al joven soberano. Pero no solo eso, la pequeña hermana de Nené también había conquistado a la madre de Francisco. Aunque Sissi era demasiado joven, su madre decidió que ella era la ideal para desposar a Francisco. Al poco tiempo, Isabel se convirtió en la emperatriz de Austria. Años más tarde, la ya emperatriz Isabel de Austria recordaría en sus diarios este suceso como un verdadero tormento: “El matrimonio es una institución absurda. Una se ve vendida a los quince años y presta un juramento que no entiende y del que luego se arrepiente a lo largo de treinta años o más, pero ya no se puede romper”. Sissi se destacó dentro de la Familia Real vienesa porque fue una soberana libre y con un gran amor a las montañas bávaras en las que creció. La emperatriz dio a luz a su primogénita a los 18 años, que murió dos años después de haber nacido. Después, Isabel trajo al mundo a dos niñas más, Gisela y Marie Valerie, sin embargo la llegada al mundo en 1858 de su primer hijo, Rodolfo, el príncipe heredero, hizo que la emperatriz pusiera toda su atención en su único varón, dejando de lado a sus dos hijas. [Te puede interesar: Sissi, la emperatriz que se convirtió en un ícono de moda] La intrincada historia de amor de Sissi ha sido tan polémica que se convirtió en el tema ideal para novelas y hasta una película titulada “Sissi Emperatriz”, la cual se estrenó en 1956. Por: Redacción Vanidades / Fotos: Archivo