El nombre de Cari Lapique, sin duda alguna, queda marcado con letras grandes dentro de la aristocracia española durante los años ochenta, ya que se convirtió en un ícono de moda y estilo para la alta sociedad de aquella época.
Por ello es que en esta ocasión queremos repasar su historia de vida, la cual no ha sido la mejor en este último año y pese a ello ha sabido reponerse. Sobre todo por las dos pérdidas a las que se enfrentó durante este verano.
¿Quién es Cari Lapique?
Para quienes no la conozcan muy bien, Cari Lapique es una figura pública española conocida principalmente por su carrera como diseñadora y empresaria. Nació el 17 de julio de 1952 en Madrid y es hija de los Condes de Villamirandala, Caritina Fernández de Liencre y Manuel Lapique Quiñones.
Desde muy joven tenía la idea de dedicarse a la moda e incluso quería abrir una tienda de ropa. Aunque antes de ello, sus padres prefirieron que primero se pusiera a trabajar para que realmente aprendiera el oficio.
Por lo que con tan solo 19 años comenzó a laborar en la boutique de El Corte Inglés del Paseo de la Castellana en Madrid como vendedora. Y tiempo después, Cari abrió su propia boutique llamada Cèline y la cual mantuvo por 15 años ya que era de las favoritas por las clientas para vestirse.
En cuanto a su vida personal, en 1975 se casó con Carlos Goyanes y con quien tuvo dos hijas: Caritina y Carla. No obstante, varios años después, en 1990, su marido pasó varios meses en la cárcel acusado de tráfico de drogas. Aunque finalmente logró salir tras pagar 90 millones de pesetas.
Pese a todo este escándalo, Lapique ha logrado mantener su círculo de amistades de la aristocracia, aunque en fechas recientes se ha enfrentado dos de las pérdidas más dolorosas en su vida.
Las dos tragedias de Cari Lapique en el mismo mes
El pasado7 de agosto, la veterana socialité sufrió la muerte de su esposo Carlos Goyanes. Un deceso que tomó a todos por sorpresa ya que el empresario se encotnraba en Marbella pasando unos días con toda su familia.
Pero como si no fuera suficiente, 19 días después, el 26 de agosto, la tragedia la azotó de nuevo ya que su hija, Caritina Goyanes, también falleció en la misma casa en la casi dos semanas antes se dio la muerte del empresario.
No osbtante, pese a estas duras pérdidas, Cari se ha refugiado en el resto de su familia, desde su otra hija y sus nietos hasta en el esposo de su difunta hija Caritina. Por lo que se ha apoyado en ellos ahora que atraviesa por esta difícil situación.