¿A quién le cuentan sus secretos los royals? Esa es una pregunta que muchos de los seguidores de la realeza se hacen. En el caso del rey Felipe VI de España, ese cuestionamiento tiene una respuesta: Álvaro Fuster, quien ha permanecido al lado del hijo de Juan Carlos I desde la infancia y ha demostrado ser un sujeto digno de confianza.
En general se puede decir que Álvaro Fuster es un empresario español, perteneciente al linaje de los Fuster Garaizabal. De acuerdo con Monarquía El Confidencial, junto a su hermano Ricardo, el hombre tomó la decisión de convertirse en accionista mayoritario de Spanish Power S.L., conglomerado dedicado al desarrollo de proyectos energéticos. Asimismo, la misma fuente afirma que Fuster ha incursionado en el negocio de las plantas fotovoltaicas en las regiones de Andalucía, Valencia, las Castillas y Aragón.
En realidad, a pesar de su longeva amistad con Felipe VI, Álvaro mantiene un perfil discreto. Sin embargo, se tiene certeza de que la fuerte relación entre ambos data del tiempo en el que el soberano pasaba sus días en las aulas del colegio Santa María de los Rosales en Madrid.
El nombre del empresario ha salido a relucir en momentos cruciales para la vida de Felipe, como el nacimiento de sus hijas o bien cuando en 2020 el rey dio positivo a covid-19, ya que Fuster se mantuvo al lado del monarca incondicionalmente.
¿Con quién está casado Álvaro Fuster, el mejor amigo de Felipe VI?
De acuerdo a los diferentes reportes de Vanitatis, el mejor amigo de Felipe VI está casado con Beatriz Mira, una discreta osteópata y diseñadora de modas, quien en el pasado tuvo una relación con el popular cantante venezolano Carlos Baute.
Según la fuente citada, Álvaro y Beatriz se casaron un 24 de marzo del año 2012, en la Hacienda de Nadales, en un impresionante recinto histórico del siglo XVIII situado en las afueras de Málaga; y, como no podía ser de otra manera, en el enlace estuvieron presentes el entonces príncipe de Asturias y su esposa, Letizia Ortiz.
Fuster tuvo tres hijos, de los cuales se suponía que Felipe sería el padrino, aunque en el bautizo del menor, acontecido en 2012, el entonces príncipe heredero no se hizo presente, debido al alto costo que representaba el traslado del cuerpo de seguridad real al evento no oficial, de acuerdo con fuentes consultadas por Vanitatis. Sin embargo, a pesar de dicho gesto de aparente desdén, la amistad entre el rey y el empresario permaneció intacta.