El futuro rey de España estuvo en Sierra Nevada sin la compañía de la princesa Letizia ni sus hijas
El príncipe Felipe estuvo el fin de semana de visita privada en la estación de Sierra Nevada, donde esquió desde el sábado por la mañana en compañía de unos amigos.
Felipe llegó temprano, y tras recoger el equipo de una tienda de esquí, se dirigió al telecabina Al-Andalus para iniciar un recorrido que lo llevó hasta las inmediaciones del Veleta, adonde accedió desde el telesilla Borreguiles.
El recinto invernal, que mantiene abiertos 85 kilómetros de superficie esquiable en todas las zonas, registró ese día una elevada afluencia de visitantes y esquiadores en un día soleado y con temperaturas que rozaban los -4ºC, en Borreguiles.
La estación, con nieve de calidad polvo, ofrece además a los esquiadores la posibilidad de practicar el esquí nocturno en sus pistas.
A este viaje privado no lo acompañaron la princesa Letizia ni sus hijas, Leonor y Sofía, que sí han disfrutado de la estación en otras ocasiones.