La princesa se mostró relajada y espontánea en la entrega de premios de la Fórmula 1 en Monte-Carlo
Conocida por muchos como ?la princesa triste? por su expresión nostálgica y porque mucho se ha asegurado que no vive dentro de un matrimonio feliz, ahora, parece que la vida le sonríe a Charlène de Mónaco.
O al menos eso pareció durante la premiación de la Fórmula 1 en Monte-Carlo, a donde acudió con su esposo, el príncipe Alberto II de Mónaco, evento que encabezó la pareja para entregar los reconocimientos y, a juzgar por las imágenes la bella sudafricana, lo pasó fenomenal.
La pareja real monaguesca estuvo acompañada de otros integrantes de la familia, como Andrea y Pierre Casiraghi, grandes aficionados de los automóviles y de este tipo de celeraciones.
Esta ha sido una de la primeras apariciones públicas de Pierre después de haberse convertido en padre por segunda vez junto a Beatriz Borromeo, el pasado 21 de mayo, cuando le dieron la bienvenida a un hermoso bebé, a quien han llamado Francesco Carlo Albert Casiraghi.
Por su lado, Charlène se mostró encantada de asistir a la entrega de premios y darle el trofeo al ganador de la competencia, Daniel Ricciardo, a quien tanto ella como Alberto felicitaron efusivamente.
Como es habitual en este tipo de actos, la entrega de trofeos suele acompañarse con una botella de champagne, misma que el ganador abre y rocía a los presentes.
En esta ocasión, y en un gesto que no nos tenía nada acostumbrados, por lo que sorprendió a los presentes, Charlène tomó entre sus manos la botella tamaño XL para tomar un delicioso sorbo de champagne.
El inusual y divertido momento fue inmortalizado para ver a una princesa relajada y muy espontánea, quien también bromeó con su marido y con el resto de los presentes.
Además, la pareja se vio muy cariñosa, tanto que se tomaba de la mano y en un momento Charlène se recargó sobre el hombro de Alberto, quien dulcemente le dio un beso en la mejilla. Sin duda, un día de agradables imágenes de esta pareja.
Para este día, Charlène eligió un original vestido largo con aperturas y estampado en vivos colores, tipo retro, de la firma suiza Akris, de la colección Primavera/Verano 2018, el cual combinó con unos zapatos azules, que hacían juego con las rayas de su vestido.
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