Desde hace un tiempo se dio a conocer que Estados Unidos es la residencia oficial del príncipe Harry, según unos papeles que salieron a la luz meses atrás. Sin embargo, ahora una nueva información sugiere que este estatus legal podría significar un riesgo para las finanzas de la Familia Real Británica.
Recordemos que el duque de Sussex y su esposa, Meghan Markle, residen en la nación norteamericana desde el año 2020, luego de anunciar su separación como miembros senior de la corona británica. Por lo que ahora viven en Montecito, California, junto con su familia.
¿Cómo afecta a la corona británica el estatus legal del príncipe Harry en Estados Unidos?
Gracias a un informe realizado por el Daily Mail, existen varias hipótesis sobre el tipo de visa que el hijo menor de Carlos III pudise haber tramitado para vivir en EE.UU. y que, dependiendo de ello, podría afectar a las finanzas de la Familia Real Británica.
Por ejemplo, el citado diario inglés menciona que si Harry contara con un visado A-1, o visa diplomática como se le conoce coloquialmente, sería un ganar-ganar para ambas partes ya que si el príncipe puede proteger sus intereses económicos y conservar cierto grado de influencia sobre su imagen pública, la cual está vinculada a su herencia que proviene de su familia.
Sin embargo, si el duque tuviera otro tipo de visa como la Green Card representaría un riesgo para las finanzas de la Familia Real ya que estaría obligada a revelar cualquier asunto financiero que tenga que ver con Harry.
Esto quiere decir que, según lo que señaló un experto en impuestos para el Daily Mail, los Windsor tendrían que proporcionar “información sobre cualquier cuenta bancaria o fideicomiso británico” al Servicio de Impuestos Internos de Estados Unidos. Además, que el esposo de la exactriz de Suits también tendría que proporcionar un informe completo de sus ingresos globales a dicho departamento.
Por otro lado, vale la pena resaltar que la Green Card o Tarjeta Verde permite a los residentes extranjeros vivir y trabajar de forma permanente en Estados Unidos. Sin embargo, se desconoce hasta el momento si el hermano del príncipe William cuenta con este documento.
Aunque el solo hecho de pensar que sí pudiese tener este estatus legal ya pone a la Casa Real en una situación bastante incómoda, pues tendría que revelar sus finanzas a otro país que no es el suyo. Una información que es muy poco probable que estén dispuestos a compartir.
