Pablo Urdangarin, hijo de la infanta Cristina, ha sorprendido con su tajante reacción al ser consultado sobre los rumores de boda de su padre, Iñaki Urdangarin, con su actual novia, Ainhoa Armentia.
El joven fue abordado esta semana en Barcelona por las cámaras de Europa Press, las cuales le preguntaron su opinión sobre el tema. Sin embargo, ante la insistencia, Pablo decidió guardar silencio, mostrándose serio y distante. Una actitud que contrasta con su cercanía habitual.
Incluso, se negó a confirmar si esta decisión les fue comunicada previamente durante su reciente reunión familiar de Navidad en Vitoria, donde también estuvo presente Ainhoa Armentia.
De ahí que sorprenda su actitud, ya que el hijo de la infanta Cristina suele mostrar una postura serena ante la prensa, aunque en esta ocasión ha optado por el silencio, demostrando que prefiere mantenerse al margen de la polémica. Su actitud refleja la complejidad de este momento para la familia y cómo los rumores afectan incluso a los más reservados.
En tanto que esta noticia llega después de años turbulentos para los Urdangarin. Las imágenes de Iñaki con Ainhoa en 2022 marcaron el fin de su matrimonio con la infanta Cristina, cuyo divorcio se formalizó en 2023. Por lo que ahora, el anuncio de esta supuesta boda parece haber reavivado tensiones entre los miembros de la familia.
¿Iñaki Urdangarin se casará con Ainhoa Armentia?
Por otra parte, fue la periodista Marisa Martín-Blázquez la que dio a conocer el pasado fin de semana en el programa Fiesta los planes de boda de Iñaki con Ainhoa, asegurando que, de sus hijos, “alguno no está del todo a favor”.
“La intención de esta boda es que sea discreta, con muy poca gente, un grupo reducido”, indicó la periodista. Por lo que desde entonces estas especulaciones solo han crecido con el paso de los últimos días.
En tanto que esta decisión de guardar silencio podría ser una estrategia para proteger su vida privada, mientras los detalles del enlace continúan generando atención mediática. La reacción de Pablo, sin duda, pone en evidencia el impacto emocional que estas noticias tienen en el entorno familiar de Iñaki Urdangarin.
