Antes de convertirse en la duquesa de Sussex, Meghan Markle se declaró abiertamente feminista, animalista y hasta opinaba sobre la política estadounidense. Ahora, sabemos que la familia real británica no puede posicionarse políticamente y mostrar su opinión sobre temas como el aborto o los derechos de las mujeres, por lo que esto son algunos de los temas a los que ha tenido que renunciar tras casarse con el príncipe Harry. Sin embargo, Meghan ha sido el centro de una nueva polémica al romper el protocolo de la realeza británica durante su visita a Irlanda, en la que se mostró “contenta” por la despenalización del aborto en este país. Este miércoles, los duques de Sussex concluyeron su visita de 24 horas a Irlanda, la primera que realizaron a un país extranjero desde que contrajeron matrimonio el pasado 19 mayo, y este viaje no estuvo exento de polémica. En Dublín asistieron a una exclusiva cena en la residencia del embajador británico, Robin Barnett, donde charlaron con diferentes personalidades de la sociedad irlandesa. Las críticas comenzaron cuando la diputada Catherine Noone, quien asistió al evento, publicó en sus redes sociales que había conversado con la duquesa sobre el aborto. Irlanda votó a finales de mayo en favor de reformar la Constitución para liberalizar la legislación vigente sobre el aborto, una de las más restrictivas y controvertidas de Europa. “La duquesa y yo hemos hablado sobre el referéndum, se mostró muy interesada y contenta con el resultado”, señaló Noone en un primer posteo. El mensaje fue corregido en una nueva publicación que reemplazó al anterior en la cuenta de Twitter de la diputada Noone. https://twitter.com/kevinohigginssj/status/1016829477454827521 Sin embargo, Meghan Markle no quedó alejada de la polémica porque la activista a favor del aborto Vicky Phelan también asistió al evento y comentó en declaraciones que han dado la vuelta a la prensa europea. “Meghan ha seguido mi historia y me ha animado a seguir luchando”, escribió. https://twitter.com/StephGrogan3/status/1016783785671692290 Sabemos que para al formar parte de la realeza británica Meghan Markle debió y debe aprender sobre protocolo y hacer algunos cambios en su vida: desde borrar sus cuentas en las redes sociales hasta iniciar los trámites para obtener la ciudadanía británica. Entre las obligaciones que debe cumplir destaca que ningún miembro de la familia real británica tiene permitido hablar sobre política desde el siglo XVII, un protocolo que violó al tomar posición respecto del aborto. En estos meses como duquesa de Sussex, a Meghan se le ha señalado con algunos otros errores de protocolo, como tomar de la mano o del brazo Harry en eventos oficiales, lo cual no es bien visto, así como cruzar las piernas de forma indebida. Por otro lado, en el mismo viaje a Irlanda reveló que también echa de menos la serie Suits, en la que llevaba trabajando siete años antes de comprometerse con el hijo menor de los príncipes de Gales.
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