Meghan Markle abrió su corazón sobre los desafíos y las recompensas de ser una madre trabajadora, en el esperado debut de su nuevo podcast “Confesiones de una Fundadora”.
En una conversación con su amiga Whitney Wolfe Herd, fundadora de Bumble, Meghan compartió su estrategia personal para asegurarse de no perderse momentos cruciales con su hija Lilibet, sin sacrificar sus compromisos profesionales.
Con la honestidad que la caracteriza, Meghan Markle habló sobre la rutina de su pequeña. “Lili todavía duerme la siesta, la recogen temprano y duerme la siesta; solo tiene medio día en preescolar”, explicó. Esta ventana de tiempo, aunque limitada, es preciosa para la Duquesa, quien ha encontrado una manera de integrar a su hija en su jornada laboral de una forma natural y espontánea, aseguró People.
“Si se despierta y quiere encontrarme, sabe dónde encontrarme, incluso si mi puerta está cerrada”, reveló Meghan Markle a través de este medio digital. “Estará sentada en mi regazo durante una de estas reuniones con todos los ejecutivos... No lo cambiaría por nada del mundo”. Esta imagen de Lilibet participando ocasionalmente en encuentros profesionales de alto nivel pinta un retrato de una madre que prioriza la cercanía y la conexión por encima de las convenciones tradicionales del mundo empresarial.
Meghan Markle asegura que quiere estar presente en el crecimiento de sus hijos
La duquesa de Sussex fue enfática al expresar su deseo de estar presente en la vida de su hija. “No quiero perderme esos momentos”, afirmó con convicción. “No quiero perderme la recogida si no es necesario. No quiero perderme la entrega”. Esta declaración resuena con muchas madres que luchan por encontrar ese equilibrio entre la vida profesional y la crianza de los hijos.
La conversación entre Meghan y Whitney en “Confesiones de una Fundadora” ofrece una mirada inspiradora y práctica sobre cómo navegar la maternidad y el emprendimiento en el siglo XXI. La duquesa de Sussex demuestra que es posible construir una carrera exitosa sin sacrificar el tiempo de calidad con los hijos, siempre y cuando se establezcan prioridades claras y se aprovechen las herramientas disponibles para integrar ambas facetas de la vida. Su enfoque centrado en la presencia y la flexibilidad seguramente resonará con muchas mujeres que buscan armonizar sus ambiciones profesionales con el amor y el cuidado de sus familias.