Mientras la monarquía británica pasa uno de sus peores momentos con las enfermedades del rey Carlos III y de Kate Middleton, ahora ha trascendido entre la prensa del Reino Unido que un confidente del monarca habría filtrado información sobre su estado de salud.
Este descubrimiento por parte de los medios ingleses se suma a la crisis que ya vive la Familia Real, la cual se encuentra con muy pocos miembros que puedan hacerle frente a los compromisos reales y sostener la agenda de la corona británica.
¿Quién es la persona que ha filtrado información de la salud de Carlos III?
El periódico The Sun ha expuesto que uno de los allegados al rey Carlos es quien se ha convertido en un informante sobre su salud, aunque las palabras que dio esta persona cercana al citado medio no representan ningún conflicto o problema, ya que menciona que se encuentra mejor y que ha respondido bien al tratamiento oncológico al que se ha sometido.
Sin embargo, el hecho de que estas declaraciones provengan de una fuente del mismo Palacio de Buckingham resulta preocupante y además pone en alerta al círculo cercano del jefe de la corona.
Aunque, por otro lado, la reaparición pública del soberano de Estado en la misa de Pascua dan cuenta de que estas palabras sí son ciertas, ya que se le vio muy animado y de buen humor. Incluso, saludó muy sonriente al público que se dio cita a las afueras de la capilla en donde se realizó este servicio religioso.
¿Existen filtraciones sobre el estado de salud de Kate Middleton?
Por otro lado, la prensa británica también ha hablado de filtraciones sobre el estado de salud de Kate Middleton, ya que algunos medios sugieren que la razón por la cual la princesa decidió hacer pública su enfermedad era por temor a que se filtrara esta información.
Incluso, se dice que alguien se habría puesto en contacto con el Palacio de Kensington, advirtiendo que tenía pleno conocimiento de su verdadera condición, por lo que a la Casa Real no le habría quedado de otra que precipitar la noticia.
Mientras que esta conjetura puede estar bien sustentada en el hecho de que, días antes de que se diera a conocer que la esposa del príncipe William tiene cáncer, el hospital en el que estuvo internada comenzó una investigación interna porque se descubrió que personal no autorizado intentó acceder al historial médico de la royal.