La Casa Real Noruega enfrenta un nuevo escándalo tras revelarse nuevos datos sobre el caso de Marius Borg Høiby que vinculan también al príncipe Haakon. Una situación que se suma a las varias acusaciones que el joven enfrenta por violencia y agresión hacia sus exparejas.
Recordemos que el verano pasado la vida de Marius dio un giro drástico luego de que agrediera a su pareja. Por ello es que, tras saberse este caso, otras exparejas de Borg también levantaron la voz, detallando episodios similares. En tanto que estás acusaciones derivaron en tres órdenes de alejamiento, días en prisión preventiva y un ingreso a un centro de rehabilitación en el extranjero.
El príncipe Haakon conocía las agresiones de Marius Borg hacia una de sus parejas
Ahora, la prensa noruega ha sacado a la luz nuevos detalles sobre el caso que resultan ser bastante comprometedores. Según el diario Aftenposten, la exnovia de Marius, Juliane Snekkestad, y su madre habrían intentado alertar a Haakon de Noruega sobre los comportamientos violentos de Borg.
Incluso, la citada publicación revelo que el abogado de Juliane, Petter J. Grødem, aseguró que la madre de Juliane ofreció documentación que probaba los actos de maltrato. “Cuando terminó la relación entre los dos, su progenitora se puso en contacto con el hijo del rey Harald. Estaba frustrada por la situación y se ofreció a darle documentación que probaba los actos del joven”, según detalló el letrado.
Sin embargo, la decepción de Juliane hacia la Familia Real Noruega por su nula respuesta es evidente. “La falta de contestación fue una falta de respeto”, afirmó su abogado, mientras detallaba que las pruebas, incluidos mensajes y fotografías, ya fueron entregadas a la policía.
Además de ello, Juliane explicó a través de un mensaje que no busca compasión, sino justicia y que tampoco desea que otras personas experimenten lo mismo que ella. “No quiero que más mujeres pasen por esto. Es un trauma que cambia la vida para siempre”, declaró. En tanto que su testimonio ha resonado entre las víctimas de violencia y ha puesto nuevamente en jaque a la Casa Real noruega.
Por otro lado, mientras el caso del hijo de la princesa Mette-Marit sigue su curso, la popularidad de la corona noruega permanece en caída libre. Las revelaciones y la aparente inacción de la Familia Real han generado críticas, y también han pues en duda su capacidad para manejar está crisis de la que también ha salido salpicado el príncipe heredero.