Este 8 de enero los príncipes Vincent y Josephine, los hijos menores de Mary y Federico de Dinamarca, celebraron su cumpleaños número 14. Sin embargo, mdisfrutan de esta etapa rodeados del cariño familiar, su futuro dentro de la monarquía será notablemente diferente al de su hermano mayor, el príncipe heredero Christian.
Con el reciente ascenso al trono de sus padres, el rey Federico y la reina Mary, el rol de cada miembro de la Familia Real ha comenzado a definirse con mayor claridad. Mientras que Christian de Dinamarca, como heredero al trono, asumirá responsabilidades más prominentes en los próximos años, Vincent y Josephine, al igual que otros royals de rango secundario, seguirán un camino más discreto y menos comprometido con los deberes oficiales.
A pesar del cambio generacional, los mellizos han conservado sus títulos de príncipe y princesa, lo que contrasta con la polémica decisión que tomó la reina Margarita II en 2022 al retirar las titulaciones de príncipe y princesa a los hijos de su segundo hijo, el príncipe Joaquín. Por lo que algo similar podría pasar en el futuro con los títulos de los benjamines de la Familia Real danesa.
¿Vicente y Josefina de Dinamarca seguirán siendo príncipes en el futuro?
Dado el precedente establecido con los hijos de Joaquín, varios expertos en realeza auguran que los actuales reyes podrían tomar una decisión similar respecto a los títulos de sus hijos menores. De hecho, la misma Mary de Dinamarca dejó abierta esta posibilidad al declarar que también evaluarían los títulos de sus hijos “cuando llegue el momento”.
Mientras tanto, Vicente y Josefina disfrutan de un equilibrio entre su vida pública y su privacidad, algo que podría cambiar drásticamente cuando lleguen a la mayoría de edad. A diferencia de su hermano Christian, cuando los mellizos cumplan 18 años no recibirpan una asignación económica estatal. Por lo que ello los conducirá, probablemente, a buscar una carrera fuera de la institución monárquica.
Pero pese a las diferencias, la corona danesa ha dejado claro que ambos seguirán siendo una parte valiosa de la Familia Real. De hecho, recientemente fueron investidos con la prestigiosa Orden del Elefante, la más alta distinción que otorga la monarquía danesa. Por lo que esta acción ha sido vista como un reconocimiento que subraya su importancia dentro del linaje real.
Sin embargo, en el caso de los mellizos, parece ser que están destinados a forjar caminos únicos y lejos del foco constante que sí acompañará a su hermano Christian, quien está destinado a convertirse en rey de Dinamarca algún día.
Por último, cabe resaltar que los mellizos también representan una mezcla de tradición y modernidad en la realeza. Y aunque su futuro se centre menos en lo institucional, será clave para mantener la cercanía y el carisma que tanto valora el pueblo danés de sus royals.