Este lunes, Meghan Markle ha vuelto a dar de qué hablar, pero no por lo que se ha dicho últimamente al referirse a ella como un “huracán”, y no a modo de analogía positiva, ya que la dimisión de tres figuras relevantes del personal de palacio se ha atribuido al aparente carácter de la duquesa de Sussex y la manera poco amable de tratarlos. Hoy es en referente a su reaparición junto al príncipe Harry al asistir a la Royal Variety Performance, un programa familiar de televisión de variedades (comedia, danza, música, magia…) que se realiza anualmente en el Reino Unido para recaudar fondos para la Royal Variety Charity, de la cual la reina Isabel II es patrocinadora, y Harry lleva presidiendo esta gala desde 2015, y se trató de la primera ocasión acompañado de su esposa.
Y cabe destacar que justo hoy, la pareja cumple seis meses de matrimonio, así que fue una buena ocasión para vestirse de manera formal y salir a modo de festejo. Para este evento, Meghan vistió un conjunto de dos piezas de la firma Safiyaa compuesto por un top de corte asimétrico con lentejuelas que formaban ramas y una falda con cola. El modelo de la parte superior es el “Malaya”, mientras que la falda es el modelo ‘Gayeta’. Para acentuar su embarazo, una cinta de raso rodeaba su figura bajo el pecho creando una falsa imagen de estilo imperio.
Combinó con unos zapatos negros, un bolso de mano cuadrado con brillos, así como unos pendientes de diamantes.
Para algunos críticos de moda, la exactriz estadounidense acertó con el look, quien a pesar de vestir de su distintivo color negro, añadió algo diferente con el estampado. Para otros, el resultado de su estilismo no fue el deseado para calmar las aguas que se vienen moviendo tras ella en las últimas semanas, y su elección de moda no resultó triunfador. ¿Qué opinas?