Las infantas Elena y Cristina de Borbón siempre se han caracterizado por su discreción y naturalidad. Sin embargo, parece ser también que ambas royals han recurrido a los retoques estéticos para rejuvenecer su apariencia.
¿Qué retoques se habrían hecho Elena y Cristina de Borbón?
Por su parte, Cristina de Borbón, de 59 años, habría optado por un procedimiento mínimo pero efectivo: la eliminación de una verruga que tenía en cerca de su nariz. Este pequeño detalle, que formaba parte de su imagen durante años, desapareció en 2022, otorgándole desde entonces un aspecto más limpio y juvenil.
También la zona de las ojeras parecen mostrar una mejoría, principalmente las arrugas de expresión. Aunque se desconoce exactamente a qué método pudo haber recurrido la infanta, expertos sugieren que ello podría atribuirse a neuromoduladores para las arrugas, inductores de colágeno y reposicionamiento.
Además, la zona del mentón se percibe con menos volumen. Algo que, según lo que sugiere la la Dra. Dagné Pupo para Semana, podrá derivarse de tratamientos de radiofrecuencia fraccionada con microagujas o polinucleótidos.
Por su parte, la infanta Elena, de 61 años, también ha recurrido a sutiles retoques a nivel estético. Aunque siempre ha sido reconocida por su expresividad y carácter vivaz, en sus últimas apariciones públicas se ha notado una piel más tersa y luminosa.
En el caso de Elena de Borbón lo que ha sido más evidente es la reducción de las arrugas, especialmente en la parte del frente y el contorno de los ojos, lo que sugiere la posible aplicación de tratamientos como el bótox o rellenos dérmicos y no tratamientos quirúrgicos.
¿Por qué las infantas Elena y Cristina no han recurrido a las cirugías faciales?
Por otra parte, es importante destacar que las hijas de Juan Carlos I y la reina Sofía recurren a prodecimientos mínimamente invasivos y que mantenga su identidad facial sin la necesidad de realizar cirugías, lo que se traduce en cambios sutiles y no drásticos con los que preservan su elegancia natural.
Sin embargo, es probable que no se sometan a cirugías estéticas invasivas debido a experiencias familiares del pasado. Recordemos que su abuela, la reina Federica, murió por un infarto al miocardio tras una operación estética en los párpados, aparentemente sin riesgo. Por ello resulta predecible que las infantas prefieran métodos que no necesiten intervención quirúrgica.