Durante el tradicional discurso de Año Nuevo, la reina Margarita anunció que dejaría el trono el 14 de enero del 2024, está es una de las decisiones más polémicas que ha tomado, aunque, el 2022, había sorprendido a propios y extraños al despojar de sus títulos reales a cuatro de sus ocho nietos con el fin de ‘adelgazar’ a la familia real.
“La crisis se produce cuando lo viejo no acaba de morir y lo nuevo no acaba de nacer”, una frase muy sabia del poeta alemán Bertolt Brecht que podría describir perfectamente la situación actual que viven la mayoría de las monarquías europeas.
Tras la pandemia provocada por COVID-19 se desató no sólo una crisis económica, sino también otros problemas sociales, como alteraciones en la salud mental de millones de personas. Dificultades que hoy día representan la prioridad número uno para muchos gobiernos que luchan por salir adelante. Ante esta situación una institución como una monarquía no es prioridad para nadie, de ahí que muchos reyes en Europa han sentido peligrar la existencia de sus propias casas reales.
Dinamarca en situación de crisis
Por ello los soberanos de diferentes naciones se han tenido que mover rápidamente para ser útiles, recaudando fondos, visitando hospitales, preparando despensas o apoyando con programas sociales de todo tipo, pero bien saben que no es suficiente. Por ello se han visto obligados a hacer cambios importantes en su organigrama reduciendo los integrantes de la familia real con el fin de ser menos costosos para sus súbditos.
Éste es el caso específico de la reina Margarita de Dinamarca, quien ha despojado de sus títulos reales a cuatro de sus ocho nietos. El objetivo como ya decíamos anteriormente es básicamente: ser menos para costar menos.
La monarca danesa ha seguido el ejemplo del rey Carlos XVI Gustavo de Suecia que, con gran visión y adelantándose sin saber a la crisis que venía, en octubre de 2019 quitó a todos sus nietos sus derechos y deberes reales con el fin de reducir la familia real al mínimo y así evitar que los pequeños generen un gasto futuro al pueblo. Esta nueva ley no aplicó para los hijos de su heredera, la princesa Victoria, los príncipes Estelle y Óscar. “A principios de año tomé la decisión de definir lo que se conoce como la casa real. La decisión era la de aclarar qué integrantes de la familia real actuarán como representantes oficiales de Suecia en el futuro. Para mí, es una manera de acotar cuáles son las expectativas. Espero que la decisión sea útil cuando mis nietos tengan que labrar su propio futuro. Pero para ese día queda mucho”.
También el ahora rey Carlos III de Inglaterra empujó esta idea con su madre, la fallecida reina Isabel II, y aunque no la convenció del todo, sigue trabajando en replicar esta nueva manera de conformar a una familia real dejando únicamente a Kate y William de Gales con sus tres hijos, la princesa Ana y su hermano menor el príncipe Eduardo con su esposa Sophie de Wessex.
Así que para la reina Margarita de Dinamarca ha sido muy lógico dar este paso, aunque sí ha generado un gran resentimiento con su hijo menor, el príncipe Joaquín.
Una familia fracturada
El pasado 28 de septiembre la oficina de la casa real de Dinamarca emitió un comunicado anunciando el retiro de los títulos reales a cuatro de sus nietos. Específicamente a los hijos del príncipe Joaquín.
“La reina ha decidido que a partir del 1 de enero de 2023, los descendientes de su alteza real el príncipe Joaquín sólo pueden usar sus títulos de conde y condesa de Monpezat, ya que sus títulos anteriores como príncipe y princesa de Dinamarca desaparecerán”.
Un vocero dijo que esta resolución se había tomado desde el mes de mayo de este año y ya se había discutido en familia; sin embargo, el príncipe Joaquín, que radica en Francia desde 2018, declaró a las puertas de su casa al diario Ekstra Bladet que todo fue muy repentino: “Me avisaron con cinco días de antelación. Escuché que dijeron que fue en mayo, pero eso no es correcto. Ese mes se presentó un plan, que básicamente decía que cuando mis hijos cumplieran 25 años sucedería. Athena cumple 11 años en enero. Estamos todos muy tristes. Nunca es agradable ver a tus hijos siendo maltratados así”, finalizó casi entre lágrimas.
Cómo afectó la decisión a Federico y Joaquín
Joaquín ha estado casado en dos ocasiones, la primera con Alexandra Manley de 1995 a 2004, con quien tuvo dos hijos, Nicolás (23 años) y Felix (20 años); de su segundo matrimonio con la princesa Marie en 2008, nacieron dos hijos más, Henri (13 años) y Athena (10 años).
Todos ellos, a partir de enero de 2023 dejaron de ser príncipes y conservaron el título de origen francés, condes de Monpezat, heredado del esposo de Margarita, el fallecido príncipe Henri. Serán tratados como ‘excelencias’ y no como ‘altezas reales’, pero sí conservan su lugar en la línea de sucesión.
Pero estas medidas de recortes institucionales también ya se han aplicado a los hijos del príncipe Federico, primogénito de Margarita, aunque de diferente modo. En 2016 la soberana anunció que el único de los cuatro hijos de éste que recibiría una anualidad del Estado sería el mayor y segundo en la línea de sucesión, el príncipe Cristian. Por decisión de Margarita, sus otros tres nietos, los príncipes Isabella, Vincent y Josephine dependerían económicamente de sus padres.
Cómo se llevan los príncipes Federico y Joaquín de Dinamarca
La relación entre los dos hijos de la reina Margarita, los príncipes Federico y Joaquín, nunca ha sido fluida, todo lo contrario.
La rivalidad entre hermanos surgió desde hace varios años y a un punto insostenible, tanto así que en 2018 la monarca cansada de los constantes pleitos entre sus dos hijos, tomó la polémica decisión de enviar a Joaquín a vivir a Francia donde trabaja desde entonces en la embajada de Dinamarca como agregado militar del Ministerio de Defensa.
Todo comenzó hace casi 22 años cuando Federico conoció a la australiana Mary Donaldson, su actual mujer, la princesa heredera consorte.
En Dinamarca se comenta frecuentemente que Joaquín está enamorado de Mary, su cuñada. Después de su divorcio en 2004 de Alexandra Manely, cuando Joaquín se volvió a casar en mayo de 2008 con la francesa Marie Cavallier, nadie quedó indiferente ante el gran parecido físico que guardan Mary y Marie, además de que se llaman igual y cumplen años con un día de diferencia, Mary el 5 de febrero, y Marie el 6 de febrero.
El escándalo fue mayor cuando tan sólo un par de meses después de su boda con Marie, Joaquín protagonizó una penosa escena durante una gala del Regimiento de la Guardia Real. Visiblemente alcoholizado, Joaquín sacó a bailar a su cuñada, Mary, e intentó besarla en la boca, la esposa de Federico lo esquivó y disimuló estoicamente con una sonrisa. Mientras tanto Marie desde su mesa aguantaba la humillación pública.
Para desgracia de todos, el momento fue captado por un fotógrafo y se convirtió en portada de la revista Svensk Damtidning.
A partir de ese momento la relación entre las dos cuñadas, Mary y Marie ha sido muy tensa por obvias razones. Y la de los hermanos más.
Con este antecedente se entiende por qué la decisión de la reina Margarita de despojar de sus títulos reales a los hijos de Joaquín ha provocado tanto resentimiento y ha generado una nueva guerra dentro de la familia real danesa. Recorte de gastos, seguro, pero también puede tratarse de una venganza entre hermanos. Esta historia no acaba aquí… seguro que continúa.
