Para nadie es un secreto que cuando Meghan Markle llegó desafiar las estrictas normas de protocolo cuando era miembro de alo rango de la Familia Real Británica. Algo que desató fuertes críticas hacia su persona por no seguir las reglas.
Sin embargo, hubo varias ocasiones en las que sus acciones no solo provocaron comentarios negativos en la opinión pública, sino que también habrían generado incomodidad dentro de la realeza. Aquí te contamos algunos de los más sonados.
Aparición sin medias durante el anuncio de su compromiso
En noviembre de 2017, en la presentación oficial de su compromiso con el príncipe Harry, Meghan optó por no usar medias, mostrando sus piernas desnudas. Esta decisión contravenía una de las reglas tácitas de la realeza, que dicta que las mujeres deben llevar medias en eventos públicos para mantener una imagen conservadora y acorde con las tradiciones.
Elección de un vestido con hombros descubiertos en el Trooping the Colour de 2018
En junio de 2018, durante la celebración del Trooping the Colour, evento que conmemora el cumpleaños oficial del monarca en turno, la duquesa de Sussex lució un vestido rosa pálido con los hombros descubiertos. Esta elección de vestuario rompió con el protocolo real, que sugiere que las mujeres deben evitar prendas que muestren demasiada piel en actos oficiales. Su atuendo generó comentarios y críticas por parte de expertos en etiqueta y seguidores de la monarquía.
Firma de autógrafos y selfies con admiradores
Como regla, los miembros de la Familia Real Británica tienen prohibido firmar autógrafos o tomarse selfies con el público. Esto por razones de seguridad y para prevenir posibles falsificaciones o malentendidos. Sin embargo, Meghan, acostumbrada a la interacción con fans durante su carrera como actriz, rompió esta norma en varias ocasiones.
Un ejemplo de ello ocurrió durante una visita al castillo de Cardiff, donde accedió a la petición de una niña para firmarle un autógrafo. Este tipo de acciones, aunque vistas como gestos de cercanía y amabilidad, fueron consideradas inapropiadas dentro del estricto marco protocolario de la realeza.
Estos episodios reflejan las diferencias culturales y generacionales entre Meghan Markle y la tradicional monarquía británica. Mientras que sus acciones fueron vistas por algunos como intentos de modernizar y humanizar la institución, otros las interpretaron como faltas de respeto a las normas establecidas. Sin embargo, independientemente de las opiniones, es innegable que Meghan ha dejado una huella significativa en la historia reciente de la Familia Real.
