El príncipe William y su esposa, Kate Middleton, se mudaron junto con sus tres hijos a la residencia de Adelaide Cottage desde 2022. Un movimiento que sorprendió a varios y que, ahora, los ha obligado a tomar la tajante decisión de reducir a su personal de servicio.
Cabe resaltar, además, que ha sido en este lugar en donde la princesa se ha refugiado la mayor parte del tiempo desde que se dio a conocer su diagnóstico y tratamiento contra el cáncer, así como cuando fue dada de alta tras haber sido intervenida quirúrgicamente en enero de este año.
¿Por qué el príncipe William y Kate Middleton disminuyeron a su personal de servicio?
Ahora, gracias a la biografía del escritor Robert Hardan, titulada Charles III: New King. New Court. The Inside Story, hemos podido darnos cuenta de que los Gales no piensa contratar a un nuevo mayordomo para su mansión. “La pareja no intentó aumentar el personal en Adelaide Cottage, sobre todo porque habría poco espacio para hacerlo. Los informes de que el Príncipe estaba contratando un valet fueron rechazados”, escribió.
Además, Hardman sugirió en la misma obra que, en todo caso, tiene el personal para encargarse de todas las responsabilidades y no habría necesidad de traer a más personas. “El personal del Palacio de Kensington incluye un ‘ayoman’, un asistente que hace varias cosas a la vez y que se ocupa de todo, desde el equipaje hasta los uniformes, pero no hay ningún ‘caballero entre los caballeros’ en el personal. Y, por supuesto, ningún mayordomo, recalcó". “Son más como ellos en casa con los niños”, apuntó.
Por otro lado, esta decisión no solo tiene razones logísticas; también se alinea con la visión de William y Kate de mantener una vida familiar más cercana. Incluso, fuentes cercanas afirman que quieren que sus hijos experimenten una infancia más “normal”, lejos del protocolo excesivo que suele caracterizar a la realeza.
De ahí que el personal que los asiste se limita a funciones esenciales, sin roles como mayordomos en la casa, algo común en otras residencias reales. Esto contrasta con las prácticas pasadas de muchas casas reales, donde grandes equipos residían en las propiedades.
Mientras que esta política refleja también un esfuerzo por proyectar una imagen más moderna y austera en un momento en que la monarquía británica enfrenta críticas sobre sus gastos. Asimismo, su estancia en Adelaide Cottage les ha permitido a los Gales estar más cerca del castillo de Windsor, donde el rey Carlos III reside en medio de su tratamiento oncológico. Por lo que es probable que ellos quieran estar cerca del monarca para apoyarlo en su batalla contra el cáncer.