La princesa Amalia de Holanda dejó a más de uno con la boca abierta durante su primer compromiso real en solitario. La joven de 21 años asistió a la ceremonia de bautizo del buque de guerra Den Helder en Vlissingen el pasado 21 de febrero, y aunque la reina Máxima no estuvo presente, su estilo estuvo más que representado con el outfit que eligió para esta importante ocasión.
La princesa de Orange no solo demostró su elegancia innata, sino que también impactó por su impresionante parecido físico con su madre, la reina Máxima. Luciendo un sofisticado traje color salmón y aretes de perlas doradas, la princesa Amalia canalizó a la perfección el estilo icónico de su madre.
Con su melena rubia recogida en una cola de caballo impecable y un abrigo en tono camel, el cual llevó sobrepuesto en los hombros, fue el toque supremo con el que la futura reina rindió un claro homenaje al característico look de la reina Máxima.
Así fue el primer evento en solitario de la princesa Amalia
De acuerdo con Tatler, este evento marcó un hito significativo para la princesa Amalia, no solo por ser su primer compromiso en solitario, sino porque demostró al mundo que está más lista para asumir su papel como heredera al trono. Con una mezcla perfecta de nervios controlados y aplomo real, Amalia de los Países Bajos se mostró serena y emocionada, consolidando su imagen pública como una digna representante de la monarquía neerlandesa.
Su debut no solo fue un guiño al legado de su madre, sino también un vistazo al futuro de la realeza en los Países Bajos. Está claro que el estilo y la elegancia de la reina Máxima han encontrado una heredera en la princesa Amalia, quien sin duda seguirá marcando tendencia en cada aparición pública.