Hagamos un viaje al pasado, específicamente a 1994 cuando se destapó un secreto a voces: el príncipe Carlos de Inglaterra admitía en televisión que le había sido infiel a Lady Di con Camilla Parker. Para ese año, los príncipes de Gales ya no estaban juntos, pero eso no significó un gran dolor y una humillación para la princesa Diana, quien como mecanismo de defensa, en lugar de ponerse a llorar por los rincones y hacerse la víctima, se empoderó y no tardó en dejar claro que estaba bien. En su primera aparición pública, la convertida en la soltera más codiciada de la familia real rompía el protocolo al usar un vestido que gritaba a los cuatro vientos: “Soy dueña de mi libertad y no cumplo con lo establecido”. La princesa Diana encabezó un evento en The Serpentine Gallery, en Londres, con un sugerente minivestido negro con escote “Bardot”, de Christina Stambolia, y que había estado tres años muy bien guardado en el clóset de Lady Di, ya que era “muy revelador” para ser usado en el círculo royal. Pero como en realidad ya no formaba parte de éste, decidió estrenarlo por todo lo alto. Una gargantilla con varias filas de perlas con un enorme zafiro y pendientes de perlas en forma de gota completaron su impactante look.
La versión moderna
Ahora, este modelo regresó con mucha fuerza de la mano de la firma española low cost Bershka, de grupo Inditex, con algunas diferencias que lo hacen más moderno. Por ejemplo, este nuevo diseño no cuenta con la ligera asimetría de su largo, no tiene el detalle de tul sobre uno de sus lados y cuenta con abotonadura frontal.
Como era de esperarse, el vestido se agotó en muy pocas horas, ya que su costo era de unos 25 dólares, un buen precio para tener una prenda similar al de icónica princesa. Muchas esperamos que debido al éxito, la marca se plantee volver a ponerlo en sus anaqueles, así que crucemos los dedos y ¡a estar al pendiente! ¿Te lo comprarías?