El pasado 11 de diciembre, un día después de la ceremonia del Premio Nobel de 2024 y la velada que siguió en el impresionante Salón Azul del Ayuntamiento de Estocolmo, la Familia Real de Suecia recibió a los galardonados, al gobierno y a los miembros del comité Nobel para el tradicional “Cena del rey” en el palacio real.
En el evento estuvieron presentes todas las representantes de los Bernadotte, entre ellas la princesa Sofía de Suecia, esposa del príncipe Carlos Felipe, quien por primera vez lució la tiara Aquamarine Kokoshnik, dejando en su alhajero su ya típica diadema nupcial.
La tiara Aquamarine Kokoshnik es una pieza de larga data, la cual resulta uno de los tesoros más importantes para la Casa Real liderada por los reyes Carlos XVI Gustavo y Silvia.
¿Cuál es la historia de la tiara Aquamarine Kokoshnik?
De acuerdo con lo publicado por el sitio web especializado en joyas reales The Court Jeweller, la glamurosa tiara, la cual cuenta en su diseño con un broche de aguamarina y diamantes a juego, perteneció originalmente a la abuela de Margaretha, Margarita de Connaught, quien fue la primera esposa del rey Gustavo VI Adolfo de Suecia.
La misma fuente afirma que supuestamente, el conjunto fue una adición posterior a la colección de joyas de Margarita, no uno de sus regalos de boda.
Actualmente se desconoce quién hizo la tiara, aunque muchos expertos la atribuyen al mismo joyero que elaboró las piezas de la corte alemana, debido a las similitudes que la diadema tiene con los tesoros mencionados.
Princess Sofia is wearing the Aquamarine Kokoshnik Tiara for the first time at tonight’s King’s Dinner for Nobel Laureates!
— The Royal Watcher (@saadsalman719) December 11, 2024
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Tanto la tiara como el broche presentan aguamarinas absolutamente enormes. Además, la corona se distingue porque su trazo coloca delicados elementos de diamantes en forma de enrejado entre las grandes piedras azules para formar la forma tradicional de Kokoshnik, el cual es un tocado femenino tradicional de Rusia usado con el vestido típico del sarafán durante los siglo XVI hasta el siglo XIX.
Tras la muerte de Margarita de Connaught, la pieza, la cual era una de las favoritas de su colección, fue heredada por su hijo mayor, Gustavo Adolfo, quien se esperaba que un día se convirtiera en rey. Su esposa, la princesa Sibylla de Sajonia-Coburgo y Gotha, estrenó la tiara en un baile antes de su boda civil en Coburgo en 1932.
The Court Jeweller afirma que Sibylla usó esta especial tiara durante toda su vida, incluso después de la prematura muerte de su esposo en un accidente aéreo en 1947.
Cuando la princesa Sibylla murió en 1972, las aguamarinas fueron heredadas por su hija mayor, la princesa Margaretha. La hija de Margaretha, llamada Sibylla en honor a su abuela, también llegó a portar con honor la gran tiara.
Finalmente, después de haberse alojado en el joyero de la princesa Christina, hermana del rey, la tiara Aquamarine Kokoshnik pasó a formar parte de las pertenencias comunes de la Familia Real de Suecia, por lo que varias royals contemporáneas la han portado. Por ejemplo la princesa Magdalena de Suecia, duquesa de Hälsingland y Gästrikland, hija menor de los reyes Carlos XVI Gustavo de Suecia y Silvia.