Para nadie es un secreto que las casas reales de Europa cuentan con una gran variedad de joyas dentro de su colección. Algo que, con el paso de los años, seguramente ha aumentado en cantidad y valor económico. Sin embargo, hay algunas piezas de la realeza que terminaron usando estrellas de Hollywood como Nicole Kidman.
De hecho, la actriz australiana llegó a lucir unos pendientes de Cartier durante un Festival de Cannes, los cuales pertenecieron a una famosa reina de España que terminó en el exilio. Por lo que si eres un conocedor de la realeza ya sabrás de quién estamos hablando, aunque si no es así quédate leyendo que aquí te contamos toda la historia.
La extraña conexión entre la reina Victoria Eugenia y Nicole Kidman
Para quienes no lo sepan, estos pendientes que usó Kidman en el famoso festival de cine eran de la reina Victoria Eugenia, la esposa del rey Alfonso XIII de España y, hasta donde se sabe, fueron comprados por la monarca consorte en la casa Cartier de París en 1923, según lo que recopila una famosa revista en su edición española.
Este par de aretes tienen un diseño de candelabro, con diamantes de talla brillante que están montados en platino. En tanto que los colgantes inferiores tenían engastados en muguet.
Mientras que la única prueba (si es que así le podemos decir) de que estos accesorios pertenecieron a la monarca consorte es de un retrato suyo que fue pintado en 1926 por Philip László. Sin embargo, hay que tomar en cuenta que para dicha pintura es probable que el artista se haya tomado alguna que otra libertad creativa para su elaboración. Por lo que no podemos asegurar al cien por ciento que sea un fiel retrato de la reina.
No obstante, tampoco se sabe bien cómo fue que Victoria Eugenia terminó por deshacerse de ellos. Pero para el investigador y joyero Pablo Milstein es probable que sus hijos o la misma reina los hayan vendido o, incluso, dado como pago de un servicio o deuda. También, existe otra teoría que sugiere que los aretes se pusieran a la venta para poder sufragar los gastos de la consorte en el exilio.
Por otro lado, estos pendientes no vieron la luz hasta 2015 gracias a que la fundación Cartier los prestó para que la actriz Nicole Kidman los usara durante el Festival de Cannes de ese año. Aunque se desconoce en qué momento fueron recuperados por la casa de joyería.
