La boda del príncipe William y Kate Middleton fue uno de los acontecimientos de la realeza que más deslumbró al mundo entero. Celebrada el 29 de abril de 2011 en la majestuosa Abadía de Westminster, esta ceremonia reunió a las diferentes monarquías,así como jefes de Estado y figuras destacadas en un evento digno de un cuento de hadas moderno.
Con un carruaje dorado, miles de invitados y una audiencia televisiva global de más de dos mil millones de personas, la unión del futuro rey de Inglaterra con la joven de origen plebeyo se convirtió en uno de los momentos más fastuosos y comentados de la década. Pero detrás de esta boda royal, también está la impresionante cifra que costó.
¿Cuanto costó la boda del príncipe William y Kate Middleton?
Según informes de la prensa, la boda de William y Kate habría costado cerca de 23,7 millones de libras esterlinas. La Familia Real Británica habría cubierto la mayor parte de los gastos relacionados con la ceremonia y la recepción, mientras que la seguridad y el transporte corrieron a cargo del Tesoro de Su Majestad, el departamento del gobierno británico encargado de la política económica y fiscal.
En tanto que el periódico británico The Sun señaló, en su momento, que los padres de Kate, Carole y Michael Middleton, contribuyeron con los gastos con cerca de 100,000 libras. Una suma que habría incluido los costos de suites en el Hotel Goring, así como el vestido de novia de Kate, diseñado por por Sarah Burton para Alexander McQueen y valorado en 250,000 libras; y el vestido de dama de honor de su hermana, Pippa Middleton.
Por otro lado, a pesar de los elevados costos, la boda de los príncipes de Gales generó un impulso económico significativo para el Reino Unido. Reportes periodísticas estiman que el turismo recibió un incremento de 2,000 millones de libras, ello gracias al interés global en el evento y al aumento de visitantes al territorio británico.
Con todo ello, podemos concluir que el enlace del príncipe William y Kate Middleton no solo fue un acontecimiento histórico y cultural, sino también una inversión que benefició económicamente al país. Así, la colaboración financiera entre la Familia Real, los Middleton y el Tesoro Británico permitió la realización de una ceremonia que, hasta hoy, es recordada por su esplendor y significado.