La duquesa de Cambridge tuvo una explicable razón para no hacerlo en un reciente compromiso oficial
Kate Middleton lució tan elegante como siempre con un abrigo rojo brillante, de Boden, que se puso sobre un vestido de color melocotón para acudir a un compromiso oficial el 17 de enero, pero le faltaba un accesorio clave: su anillo de compromiso.
A la royal de Inglaterra rara vez se le ve sin su icónica joya de diamantes y zafiros, que una vez perteneció a la princesa Diana. Sin embargo, durante su visita con los pacientes más jóvenes del Hospital Great Ormond Street, ella solo utilizó la alianza de oro.
Kate, quien estuvo presente para inaugurar el Mittal Children’s Medical Center del sanatorio, no lo lució por política de la institución, la cual indica el uso de mínimas joyas.
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Debido a que hay que lavarse las manos cuidadosamente antes de recorrer las salas y las áreas de tratamiento del hospital, se recomienda que los visitantes se despojen de sus joyas antes de ingresar.
Su impresionante anillo de compromiso es un espectáculo para la vista, ya que consta de 14 diamantes de solitario que rodean un zafiro de Ceilán ovalado de 12 quilates, los cuales están incrustados en oro blanco de 18 quilates. Sin embargo, su alianza, que usualmente porta junto al de compromiso, es mucho más simple.
El anillo de bodas de oro de Gales es una tradición real de 88 años, que data de Elizabeth Bowes Lyon y George VI.
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