Solo espera a ver la cara de la duquesa cuando le dicen lo que tiene que hacer
Con sede en el Norte de Gales, en Inglaterra, la duquesa de Cambridge y el príncipe William vivieron una experiencia memorable y como nunca antes. En lugar de realizar una visita tradicional en la que usualmente visten sus mejores atuendos y hacen presencia en nombre de la monarquía británica, esta vez, la pareja real se lanzó por una vivencia diferente.
Luciendo cascos de protección y prendas para la temporada invernal, Kate Middleton fue una de las invitadas especiales para escalar el gran muro de las Torres Campestres y Residenciales del Centro Educacional en Capel Curig.
El lugar principal de visita es un sitio a cargo del Consejo de Wolverhampton dedicado a la educación infantil y a la promoción de aventuras para los más pequeños. Entre risas, momentos de adrenalina y un paisaje absolutamente espectacular, los miembros de la realeza británica disfrutaron de un día único y, ciertamente, inesperado.
