No cabe duda que Kate Middleton no deja de sorprender, por lo general de forma positiva. Después de lucir como una verdadera princesa vestida de blanco en la pasada entrega de los premios BAFTA, este miércoles, la duquesa de Cambridge retomó su agenda laboral para asistir a la conferencia “Salud Mental en la Educación” organizada por la Fundación Real en el Mercers’ Hall de Londres. Para esta cita, Kate estrenó un traje de tweed en color negro con hilos blancos, compuesto por una elegante chaqueta cruzada de doble botonadura y una falda corta con pequeño vuelo. Ambas prendas con acabado desflecado. Algunos observadores de moda notaron que el diseño de los botones del traje son muy parecidos a su anillo de compromiso. No se sabe si es casualidad o sus asesores de moda están cuidando hasta el último detalle de su apariencia, ahora más que Meghan Markle ha aparecido en escena y ambas son analizadas de pies a cabeza.
La duquesa de Cambridge completó su outfit con medias negras opacas, zapatos de tacón, de Tods, y clutch negro, de Mulberry.
En total, una combinación clásica y perfecta para el invierno, la cual guarda la personalidad de Kate. Como es habitual, su mejor accesorio fue la gran sonrisa que siempre la acompaña, pero lo que llamó aún más la atención fue su melena, la cual llevó suelta, con ondas y volumen, pero lucía un tono más claro que lo habitual, un castaño tirando al cobrizo.
La simpática duquesa no suele hacer cambios en su apariencia de forma drástica. Cuando recién se casó se cortó el cabello, ya que aparentemente era demasiado largo para los estándares del palacio real, luego la vimos con flequillo, pero no había hecho un cambio de color de forma drástica. ¿Habrá sido la luz o estará estrenando look? ¿Qué opinas?