Las vacaciones de verano de la infanta Elena han dado bastante de qué hablar durante los últimos días ya que ahora ha trascendido que viajó a Portugal. Un destino que resulta ser muy especial para la familia Borbón.
Según la información que reporta la prensa portuguesa, la hermana mayor de Felipe VI se trasladó hasta la isla lusa de Madeira junto con su amiga Rita Allendesalazar, condesa de La Ventosa, a quien conoce desde la infancia. En tanto que esta escapada se habría dado días antes de que Elena viajara a Abu Dabi.
Los detalles de la escapada de Elena de Borbón a tierras lusas
Fue el diario Journal da Madeira el que dio a conocer los detalles de estas lujosas vacaciones de la royal española en Portugal, entre ellos el sitio en donde se habrían alojado así como el paseo temático que dio durante esta escapada.
También, la misma publicación señala que la infanta Elena y su amiga Rita se quedaron en el hotel Meliá Madeira Mare e, incluso, la cuenta de Instagram de este cinco estrellas —ubicado en Funchal y que ronda los 200 euros la noche— agradeció la confianza de ambas por haber elegido este lugar para hospedarse.
Este hotel de estilo contemporáneo y diseño depurado cuenta con habitaciones modernas, todas con balcones privados e impresionantes panorámicas al océano Atlántico. Además, dispone de un spa completo, gimnasio equipado y una espectacular piscina frente al mar, según la descripción de su sitio web.
Además, Elena también visitó y recorrió todo el Parque Temático de Madeira. Un momento que esta atracción turística no dejó pasar ya que en sus redes sociales publicaron una imagen de la infanta junto a la artesana Laurinda Jardim.
Tras Portugal, la infanta Elena viaja a Abu Dabi
Luego de esta visita a la isla lusa, la duquesa de Lugo viajó a Abu Dabi para ver a su padre, el rey emérito Juan Carlos I. Unas vacaciones a las que también se le unió la infanta Cristina, tal y cómo lo reportó en exclusiva el sitio español Vanitatis días atrás.
Sin embargo, en esta visita Elena de Borbón no solo aprovechó para ver a su padre, sino también a su hijo, Froilán de Marichalar, pues recordemos que él también reside en la capital de los Emiratos Árabes desde el año pasado. Una medida que sirvió para refugiar al joven de la presión mediática derivada de sus excesos y alocada vida nocturna y que además le ha cambiado la vida para bien.