Este jueves, los duques de Cambridge hicieron una pausa de sus vacaciones de verano para participar en un evento solidario: la regata de la King’s Cup, es decir, al Copa del Rey de vela. La cita se realizó en Cowes, en la isla de Wight, y se trata de una competición totalmente solidaria. En ella, participan ocho embarcaciones, y Kate y William se convirtieron por un día, en rivales. Además, los duques estuvieron acompañados de sus hijos mayores, George y Charlotte, quienes observaron competir a sus padres desde otra embarcación.
Travesuras
Charlotte, la más inquieta estuvo haciendo caritas y sacando la lengua, gesto que Kate corrigió de inmediato; mientras que George, acompañado de su abuelo Michael, se puso una gorra marinera y estuvo un poco más tímido. También pudimos ver que el pequeño príncipe ya se encuentra en la etapa de muda de dientes. Son ellos quienes patrocinan a las organizaciones que representa cada embarcación, según lo explica la cuenta oficial de Instagram de Kensington Palace. Los duques tuvieron que cambiar su agenda oficial ya que la cita estaba prevista para este próximo viernes 9, sin embargo, debido a las condiciones climáticas, que no eran tan buenas como esperaban, se tuvo que adelantar la fecha para un día antes. Después de esta pausa vacacional, los duques retomarán sus vacaciones en Anmer Hall, la casa de verano que les regaló la reina Isabel II con motivo de su boda. Lo más probable es que también visiten Balmoral, residencia veraniega de los Windsor.
