Después de permanecer algunos meses fuera del foco mediático, la princesa de Gales, Kate Middleton, vuelve a ser noticia, ahora que las vacaciones de verano se encuentran en su ocaso. Esta vez por haber protagonizado un vergonzoso momento en las vísperas de que sus tres hijos, George, Charlotte y Louis, regresaran al colegio en 2018.
Según se reporta desde la prensa británica, los tres hijos del príncipe William regresarán a clases en la escuela Lambrook esta semana, después de haber pasado un merecido tiempo de descanso en Balmoral, junto al rey Carlos III y el resto de sus parientes reales.
Cabe recordar que el trío de moni royals comenzaron en la escuela en 2022, después de que la Familia Real de Gales se mudara a Adelaide Cottage en Windsor. Desde ese momento, su madre, la princesa de Gales, se ha asegurado de que sus vástagos tengan los uniformes y el equipo adecuados en cada inicio de clases.
¿Cuál fue el vergonzoso momento de regreso a clases experimentado por Kate Middleton junto a George, Charlotte y Louis ?
De acuerdo con el diario británico The Mirror, en años anteriores, antes de que el cáncer se le fuera detectado a Catherine, se le llegó a ver junto con sus hijos en las tiendas locales, con el fin de equiparlos con ropa y zapatos nuevos para el regreso a clases.
Especialmente, el medio citado recalca en especial un año en el que Kate fue a que George y Charlotte se probaran zapatos nuevos para la escuela, “no todo fue fácil y cometió un error común”, se recalca en la publicación británica.
En 2018, testigos vieron a la futura reina con sus dos hijos mayores de compras en los grandes almacenes Peter Jones de Londres. Y una fuente le dijo a la revista Hello! que Kate “olvidó llevar calcetines para que George y Charlotte se los pusieran cuando se estaban probando sus zapatos nuevos”.
De acuerdo con el texto retomado en The Mirror, “los pequeños llevaban sus sandalias de verano cuando fueron a elegir sus nuevos zapatos. Así que, como muchas madres antes que ella, Kate tuvo que pedir prestados calcetines en la tienda para asegurarse de que los estaba comprando de la talla correcta”. Un pasaje que muchos ya se han atrevido a calificar como el momento más embarazoso para la princesa, quien demostró en ese momento ser como cualquier otra madre, a quien las tareas previas al regreso a clases suelen poner nerviosa.