En la reciente fiesta de jardín celebrada en el Palacio de Holyroodhouse, la elegante reina Camilla de Reino Unido deslumbró a todos con un broche excepcional. Este broche, valorado en más de dos millones de euros, tiene una historia fascinante y un significado especial.
Para el evento, la reina Camilla eligió llevar el Broche de Diamantes de la Reina María. Este broche, que originalmente perteneció a la Reina Isabel II, es una joya con un profundo significado. A continuación, te contamos más detalles:
Historia y procedencia:
- El broche fue diseñado por los joyeros Edward & Sons y fue entregado a la Reina María en 1927.
- Tras la muerte de la Reina María en 1953, la princesa Isabel (quien más tarde sería coronada como la Reina Isabel II) heredó su vasta colección de joyas, incluyendo este broche de diamantes.
El motivo del broche:
- El broche presenta un motivo de cardo, que es el emblema floral de Escocia. El cardo fue naturalizado como el símbolo nacional de Escocia en 1882, cuando el autor Sir Walter Scott lo eligió como un sello durante la visita del Rey Jorge IV al país.
- La elección del cardo en el broche es un homenaje a la cultura escocesa y al patrimonio real de la Reina Camilla.
- Aunque no hay evidencia histórica, existe una leyenda interesante. Durante la Alta Edad Media, los escoceses se enfrentaban a los vikingos en una batalla. Un vikingo pisó un cardo y, al sentir las espinas, gritó, alertando a los escoceses y salvando el día. En agradecimiento, decidieron que el cardo sería la flor nacional de Escocia.
Conexión con la Reina Isabel II:
- La Reina Isabel II también llevó este broche durante su propia visita a Edimburgo en junio de 2019, con motivo del 20 aniversario del Parlamento Escocés.
- El broche es un recordatorio afectuoso de la Reina Isabel II, quien falleció en septiembre de 2022.
En resumen, este broche no solo es una joya deslumbrante, sino también un símbolo de historia, tradición y afecto. La reina Camilla ha sabido honrar el legado de la realeza británica con elegancia y estilo.
La relación entre la reina Isabel II y Camilla Parker Bowles ha sido compleja desde el principio. Aunque Camilla fue una figura oscura en la familia real según la reina, debido a su papel en el fracaso del matrimonio de Diana Spencer, Isabel se negó a reconocer su existencia.
A pesar de esto, la reina inicialmente simpatizó con Diana, pero su deber y servicio siempre prevalecieron. En resumen, la relación entre la reina y Camilla ha sido un delicado equilibrio entre deber, afecto y conflictos familiares.